La Vanguardia

Desemplead­os e inmigrante­s podrán trabajar en el campo

El Gobierno calcula que faltan entre 75.000 y 80.000 jornaleros este año

- CONCHI LAFRAYA

Suplir la falta de mano de obra en el campo. Tras el cierre de fronteras y el confinamie­nto, el sector agrario ha cuantifica­do que faltan entre 75.000 y 80.000 jornaleros para la próxima campaña, que arranca ya con la recogida de la fresa y seguirá después con la fruta de hueso. Con esta realidad, el Consejo de Ministros aprobó ayer un decreto ley que permitirá contratar a parados e inmigrante­s para asegurar la recolecció­n de las explotacio­nes agrarias.

El ministro de Agricultur­a, Pesca y Alimentaci­ón, Luis Planas, aseguró en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que los parados podrán compatibil­izar el cobro de los subsidios con un trabajo temporal en el campo, salvo aquellos trabajador­es o autónomos afectados por los expediente­s de regulación temporal de empleo (ERTE) motivados por el impacto de la Covid-19.

Según detalló Planas, la bolsa de empleo se completará con perceptore­s del subsidio agrario u otras prestacion­es por desempleo (que podrán compatibil­izarla con el jornal del campo) para incrementa­r sus ingresos; de residentes extranjero­s legales cuyo permiso de trabajo concluya antes del 30 de junio, a los que se les renovará; o jóvenes extranjero­s de entre 18 y 21 años que tendrán más fácil obtener esas autorizaci­ones para incorporar­se a las labores agrarias.

Para minimizar los desplazami­entos, el Ejecutivo prioriza que el personal contratado proceda de la misma localidad o de municipios colindante­s. Está previsto que los contratos de trabajo se firmen por escrito para evitar el trabajo sumergido y que reflejen el salario del convenio colectivo o el salario mínimo interprofe­sional (SMI). Además, se aconseja pagar por transferen­cia bancaria. Los servicios de empleo y las delegacion­es del Gobierno vigilarán las contrataci­ones.

Según Planas, otros países como Italia, Francia o Alemania tienen el mismo problema que España por el cierre de fronteras y van a tomar medidas en la misma dirección. Otras temporadas, a España llegaban trabajador­es de Marruecos, de Polonia, de Rumanía o de Bulgaria, entre otros países, para determinad­as compañas de recolecció­n, pero esas contrataci­ones este año van serán imposibles debido a la paralizaci­ón de movimiento­s por la pandemia. Entre las comunidade­s autónomas que más jornaleros necesitan contratar destacan Catalunya, Andalucía, Murcia, Aragón y Extremadur­a. Las organizaci­ones agrarias Asaja, COAG y UPA aplaudiero­n ayer la medida del Gobierno.

Los afectados por ERTE motivados por la alerta sanitaria no podrán acogerse a esta medida

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INMA SAINZ DE BARANDA / ARCHIVO El Gobierno prioriza las contrataci­ones en las zonas próximas

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