Sin mascarillas
Un titular que señalaba la previsión con que actuó la comunidad china provoca
quejas de lectores
El sábado 4 de abril, Sociedad incluyó, en medio del despliegue informativo que dedica cada día a la emergencia sanitaria, un reportaje sobre el desabastecimiento en las farmacias de mascarillas, guantes y alcohol desinfectante. El titular fue: “Las mascarillas se las llevaron todas los chinos hace mes y medio”.
Recibimos quejas por parte de lectores que consideraron que el titular podía fomentar el racismo y los prejuicios contra la comunidad china. Entre ellas, el correo que nos envió Cristina Fong resumía sus sensaciones: “He dudado en escribir este e-mail porque aprecio la labor de todos los periodistas que nos mantienen informados en este momento de crisis sanitaria, pero como española de origen chino que soy, me he sentido profundamente ofendida con esta noticia”.
Susana Quadrado, redactora jefa de Sociedad, explica: “El brote de Wuhan anticipó una reacción de la comunidad china en todo el mundo. Barcelona y otras grandes ciudades españolas no fueron una excepción. Los farmacéuticos consultados por La Vanguardia coincidieron en apuntar que agotaron el stock antes de que aquí el resto de la población tuviera idéntica visión de riesgo que anticipó la comunidad china”.
“En ningún caso existe ánimo de estigmatizar y mucho menos el tono es despectivo hacia ese comportamiento –continúa Quadrado–. Es meramente un relato expresado por los farmacéuticos sin ningún ánimo de juzgar: sólo resulta descriptivo de la situación y la distinta respuesta ante la emergencia”.
Lo cierto es que el texto del reportaje no se centraba en ese factor concreto, sino que relataba el mal uso que hacen determinadas personas de las mascarillas de más alta protección y también denunciaba el precio exorbitante que piden ahora a las farmacias determinados distribuidores.
La comunidad china, además de adelantarse en sus medidas de previsión, cerrando tiendas antes incluso de que el Gobierno decretara el estado de alarma, también ha ayudado en muchos casos, gracias a los contactos directos de los empresarios chinos asentados en España, a conseguir esos productos sanitarios difíciles de adquirir en el mercado internacional.