Nissan admite preocupación por la planta de Barcelona
Los sindicatos ratifican la huelga a partir del 4 de mayo
El presidente de Nissan Europa, Gianluca De Ficchy, aseguró ayer que entiende “la preocupación por los planes futuros para la planta de Barcelona”. Así lo admitió durante la reunión telemática que mantuvo con los comités de empresa de las plantas de la Zona Franca de Barcelona y de Montcada, y después de que los sindicatos convocaran huelga indefinida a partir del 4 de mayo, cuando está prevista la reanudación parcial de la fabricación.
De Ficchy, que estuvo acompañado del director general de Nissan Motor Ibérica, Genís Alonso, negó que la decisión esté ya tomada, en referencia a los temores expresados estos últimos días por los sindicatos respecto al cierre de la factoría barcelonesa.
De Ficchy subrayó que Nissan, al igual que sus competidores, está trabajando con muy poca visibilidad de la demanda en Europa y está analizando diversas opciones, según explicó la empresa en un comunicado. El directivo añadió que, como ya dijo en enero, “se informará de nuevo antes de la parada técnica de verano y se explicará a todos el resultado del estudio (de viabilidad). Hasta entonces, continuamos discutiendo las opciones con Japón”.
Tras el encuentro, los sindicatos expresaron su “decepción” por no haber conseguido aclarar el futuro y se ratificaron en la convocatoria de huelga indefinida. Ayer mismo registraron la petición en el Departament de Treball para todos los centros de trabajo de Nissan en Barcelona:
Zona Franca, Montcada, Sant Andreu de la Barca, el centro de recambios y el centro logístico del puerto.
Los sindicatos han intensificado sus protestas tras conocer que la compañía sólo tiene previsto reanudar la producción en una de sus dos líneas de fabricación y con el único objetivo de entregar las últimas 1.300 pick-up que tiene comprometidas conmercedes. Para la otra línea (la 1, donde se fabrica la furgoneta eléctrica ENV200) no hay fecha de reapertura.
Los sindicatos –Sigen-usoc, CC.OO., UGT y CGT– han pedido la intervención urgente del Ministerio de Industria y de la Generalitat para que medie ante la multinacional japonesa. Miguel Ruiz, representante de Sigenusoc, se ha puesto en contacto con la Casa Real apelando a las buenas relaciones del rey Felipe con el emperador japonés. “Tenemos que intentar todas las posibilidades”, dijo Ruiz.
Ya antes de la propagación de la pandemia, la planta de la Zona Franca funcionaba a menos del 25% de su capacidad, y sin plan de adjudicación de nuevos productos a corto plazo. La crisis afecta a algo más de 3.000 trabajadores.
El presidente europeo confirma que hay varias opciones y la decisión se conocerá antes del verano