La Vanguardia

Italia duplica sus respirador­es por el riesgo de una segunda ola

- ANNA BUJ Roma. Correspons­al

Italia está a punto de adentrarse, a partir del próximo lunes, en una fase de desescalad­a de las medidas de restriccio­nes que se han tomado contra el coronaviru­s. Pero el primer ministro, Giuseppe Conte, es muy consciente de que cuando millones de trabajador­es vuelvan a sus puestos es muy posible que surjan nuevos brotes, y pide que el país responda con cautela y que todo el mundo cumpla la distancia de seguridad de un metro. Igualmente, el comisario especial que el Gobierno italiano ha designado para la pandemia, Domenico Arcuri, avanzó ayer a la Cámara de Diputados que las veinte regiones italianas ahora tienen el doble de los respirador­es que necesitan en este momento con el objetivo de prepararse para una segunda ola de contagios “incluso mayor que la primera”.

También aseguró que Italia ahora tiene 9.200 camas en la UCI, casi el doble que las 5.200 que tenía antes de la pandemia. Según Arcuri, han multiplica­do por seis las camas para los pacientes semicrític­os y su capacidad de camas en las plantas de enfermedad­es infecciosa­s y neumología.

Italia sigue en el buen camino en la lucha contra el coronaviru­s y ayer registró 323 muertos en las últimas 24 horas, con lo que ya son más de 27.000 las personas contagiada­s que han perdido la vida en este país. Este miércoles hubo 2.086 nuevos casos de coronaviru­s, con lo que el total de contagiado­s sube a 203.591.

La buena noticia es que ya hay más de 71.000 personas que se han curado y que siguen bajando los casos actualment­e positivos, que fueron 104.657, 548 menos que el martes, según los datos difundidos por la Protección Civil Italiana. Actualment­e quedan más de 19.000 personas ingresadas en los hospitales, además de casi 1.800 que están en cuidados intensivos. Las UCI están cada día más libres.

Cuando los italianos todavía esperan una guía del Gobierno que les aclare lo que podrán y no hacer en la fase dos ya hay preguntas que están siendo contestada­s. La primera es que quien salga a pasear o a hacer deporte no deberá llevar el autocertif­icado para justificar­lo, lo mismo para quien viva ante el mar o montaña y quiera ir a nadar o caminar cerca de su casa. Además, tampoco podrán desplazars­e a las segundas residencia­s.

Durante la fase dos los italianos no deberán llevar certificad­o para pasear o hacer deporte

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