Iberdrola mantiene objetivos pese al virus
La energética gana 968 millones de euros, un 5% más
Iberdrola confía en contrarrestar el impacto del coronavirus. Tras cerrar el primer trimestre con una ganancia neta ajustada de 968 millones de euros, el 5,3% más, la energética presidida por Ignacio Sánchez Galán mantiene la previsión de cerrar el año con un crecimiento del beneficio de hasta el 9% sobre los 3.400 millones del 2019. El incremento del dividendo iría en una línea similar. La gran baza es la inversión, que se ha disparado un 24% en tres meses, a 1.729 millones, casi la mitad para renovables.
Pese al esfuerzo, las cuentas de la firma han notado ciertos desgastes por la pandemia. En España, el beneficio neto cae el 7%, tras disparar la inversión el 51%, aumentar la fiscalidad y descender los precios mayoristas el 37% y la demanda peninsular el 3% –el incremento en los hogares no cubre la caída en las empresas–. También ha elevado provisiones en un 38%, a 95,5 millones de euros, por el aumento de la deuda de clientes atribuible a la crisis sanitaria.
Para combatir cualquier roto, cuenta con un “colchón” de 484 millones de euros por la plusvalía de la venta de su participación en Siemens, un “colchón” que ofrece suficiente garantía para cumplir objetivos, declaró Sánchez Galán a los analistas. La ganancia con extraordinarios –como la venta de
Siemens Gamesa– sube en el primer trimestre a 1.257 millones de euros, el 30% más, también por un entorno estable en Reino Unido. Además, se apunta que las decisiones tomadas –como acelerar compras a sus proveedores por 3.800 millones y la contratación de 5.000 personas en el año– contribuyen a limitar la caída de la demanda. La receta contra el impacto del coronavirus pasa principalmente por acelerar las inversiones. En el último año llegan a 9.887 millones de euros, con 5.500 MW de potencia nuevos, hasta los 53.270 MW en total. Otros 8.500 MW están en construcción. “El camino de la recuperación económica debe ser necesariamente verde, con la lucha contra el cambio climático como elemento central”, apunta Sánchez Galán.
Entrando al detalle, el mercado liberalizado ha mejorado el ebitda el 26,5%, a 759,6 millones, y las renovables, la gran apuesta de futuro, el 6,1%, a 725,5 millones. De su parte, el negocio regulado, el principal, ha reducido el beneficio bruto el 4,7%, a 1.256,6 millones, por la menor retribución en España y ajustes contables en Estados Unidos. El ebitda total sube el 5,8%, a 2.750,6 millones.
La deuda del grupo ha crecido en 1.363 millones de euros, a 38.065 millones. La empresa afirma contar con 14.400 millones en liquidez, “suficiente para cubrir las necesidades financieras de 30 meses en un escenario de normalidad”. Sánchez Galán dijo que confía “plenamente” en “la fortaleza del modelo de Iberdrola”.
La empresa fía superar la crisis a las fuertes inversiones, sobre todo en las renovables