El BCE, dispuesto a aumentar la compra de deuda pública
Lagarde abre la puerta a aumentar la compra de deuda pública
El Banco Central Europeo dibujó ayer un panorama devastador sobre la economía de la zona euro. La presidenta de la institución, Christine Lagarde, pronosticó una caída del PIB de entre un 5 y un 12% este año 2020, un descenso que variará en función de la duración de las medidas de contención y del éxito de las políticas para mitigar las consecuencias económicas para los negocios y los trabajadores. “La contracción es de una magnitud y de una velocidad sin precedentes en tiempos de paz”, sentenció.
El pronóstico de Lagarde coincidió con la publicación de la primera estimación de Eurostat de los resultados trimestrales del PIB de la zona euro. Resultaron ser los peores registrados desde 1995 (el año que esta oficina de estadística comunitaria empezó a registrar los datos). De enero a marzo, el PIB se contrajo un 3,8% respecto al último trimestre del 2019 y un 3,3% respecto al mismo periodo del año anterior. El porcentaje en el conjunto de la Unión Europea fue levemente inferior, del 3,5% respecto al último trimestre del 2019 y del 2,7% respecto al mismo trimestre del año anterior.
Ante esta situación, el BCE reiteró ayer su compromiso en hacer todo lo que haga falta para mitigar el impacto de la pandemia en la zona euro. Lagarde no anunció medidas de gran calado pero reforzó su compromiso con los programas que ya existen y aprobó operaciones para incrementar la liquidez a la banca.
“El BCE está plenamente preparado para incrementar la cuantía y la duración de su programa de compras de activos tanto como sea necesario y hasta que no finalice la crisis”, dijo la presidenta en su primera rueda de prensa telemática. Con estas palabras anunciaba que, de momento, el BCE mantiene en 750.000 millones de euros la magnitud de su programa de compra de activos contra la pandemia (el PEPP) al tiempo que deja la puerta abierta a incrementar los plazos y las cuantías.
El PEPP se aprobó en marzo con el principal objetivo de adquirir hasta finales de año bonos de deuda soberana a los 19 países de la eurozona, obligados a aumentar el déficit para hacer frente a la emergencia sanitaria y económica ocasionada por la pandemia del coronavirus.
Pero vista la gravedad de la crisis y las palabras de Lagarde, muchos analistas consideran que la cuantía será insuficiente y que próximamente, el BCE deberá ampliarla. “El regulador podría llegar aprobar 750.000 millones más para absorber la deuda pública durante este y el próximo año. La cuantía existente sirve para cubrir el déficit de este año, que gira entorno al 8%, pero no para el próximo año, previsto en el 5% o el 6%”, comenta Roberto Ruiz Scholtes, director de estrategia en la consultora de banca privada UBS. Asimismo, Lagarde dijo que las compras bajo este programa se seguirán realizando de forma “flexible”, por lo que el BCE se hará con los tipos de activos que considere y en las jurisdicciones que sea necesario. “Primero empezará con la compra de bonos de la periferia y a finales de año con la de los países del norte”, señaló Ruiz,
En la rueda de prensa, la presidenta recordó que el PEPP se engloba dentro de un conjunto de medidas, que ya suman casi un billón de euros. En este sentido, recordó que seguirá vigente el programa de compras públicas (APP) a un ritmo neto de 20.000 millones al mes durante tanto tiempo como haga falta.
El BCE confirma su compromiso a hacer todo lo que haga falta para mitigar el impacto de la pandemia