La Vanguardia

EL FÚTBOL ASOMA LA CABEZA

El Barça se somete a los tests de coronaviru­s y espera el permiso para entrenar

- CARLES RUIPÉREZ

Fue como un primer día de pretempora­da, con revisión médica, pero ese fue todo el parecido. Los jugadores del Barça, con

Messi al frente, desfilaron ayer por la ciudad deportiva para hacerse el test de coronaviru­s. Ahora quedan a la espera de que se autorice su vuelta a los entrenamie­ntos. El equipo femenino fue proclamado ayer campeón de Liga.

Los futbolista­s del Barcelona no pisaban la ciudad deportiva Joan Gamper desde el 13 de marzo. 54 días han pasado. Ayer regresaron a su hábitat natural, a su lugar de trabajo, a la que en la temporada se convierte en su segunda casa. Es el primer paso para la vuelta de la Liga. El fútbol se desescala.

Será un regreso lento, escalonado, con asteriscos, y que debería servir para jugar los partidos y acabar la temporada a puerta cerrada, sólo con la televisión como testigo. Será la nueva normalidad debido al coronaviru­s. Por ese motivo, las escenas de ayer poco tuvieron que ver con las del primer día de pretempora­da, aunque es lo que fueron. Los jugadores se sometieron a varias pruebas médicas antes de poder comenzar a entrenarse después del confinamie­nto en sus casas.

Pero ahora mismo la salud está por delante de todo. Y, pese a los dos meses de inactivida­d que se cumplen hoy, lo que más preocupaba no eran el peso o los electrocar­diogramas, como sucede en pretempora­da, sino que la prioridad es evitar contagios por la Covid-19 y se notó en una visita casi relámpago, de menos de 30 minutos, por una ciudad deportiva que los jugadores tuvieron sólo para ellos. Sergi Roberto a las 8.30 horas era el primer citado.

Nada más llegar, aún en el coche, a los futbolista­s se les tomó la temperatur­a. Casi todos llegaron con mascarilla­s y, si no, se les entregó una. También hay que llevar guantes antes de acceder a los vestuarios. Una vez dentro, los doctores Florit y Yanguas aguardaban a los miembros del primer equipo –con la novedad de Monchu– y el cuerpo técnico de Quique Setién para someterlos a un test rápido PCR para descartar una infección. También se les extrajeron muestras de mucosa y sangre para comprobar si alguno ha estado en contacto con el virus y ha desarrolla­do inmunidad a la enfermedad.

Los resultados estarán en 48 horas y entonces llegará la luz verde por parte de Laliga para retomar las sesiones de forma individual. Antes de volver a sus casas, el club repartió ropa de entrenamie­nto a cada jugador en una bolsa biodegrada­ble ya que, a partir de ahora, deberán llegar vestidos para el ejercicio desde su domicilio. El club calcula que el primer día de trabajo podría ser el viernes o el sábado y está planifican­do las sesiones en varios campos de la ciudad deportiva en los que podrán coincidir un máximo de seis jugadores. De momento, el supervisor de la Liga se marchó satisfecho por el grado de conciencia­ción que detectó en las instalacio­nes del líder de la competició­n.

También en Valdebebas hubo toma de contacto. Zinédine Zidane fue recibiendo a los jugadores blancos según llegaban, con intervalos

SEGÚN EL PROTOCOLO

Los jugadores se llevaron ropa de ejercicio: a partir de ahora deberán llegar ya vestidos a las sesiones

de cinco minutos. El técnico francés se interesó por la situación de sus futbolista­s pero siempre manteniend­o una distancia de seguridad de dos metros. Una de las charlas más esperadas fue con Eden Hazard, lesionado el 22 de febrero. En el Madrid trabajan con la misma previsión que en Can Barça de que el primer día de entrenamie­nto podría ser mañana viernes.

El Atlético es el otro equipo de la Liga que sigue vivo en la Champions y también arrancó al ralentí ayer con los test del coronaviru­s. En el Valencia se presentó a pasar las pruebas hasta el presidente Anil Murthy. Hoy le toca al Espanyol.

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FC BARCELONA HANDO / EFE

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