La Vanguardia

Se acabó el impacto y empieza el afrontamie­nto

- Ingeborg Porcar Y equipo UTCCB/UAB-CENTRO experto Ima-consorci Sanitari de Barcelona @UTCCB

Hoy hace una semana que hemos salido del confinamie­nto más estricto. Todos, estemos en fase 0 o en fase 1, podemos salir a pasear y lentamente estamos pudiendo volver a hacer algunas de las actividade­s habituales. Por tanto, técnicamen­te podemos decir que hemos llegado al final de la fase del impacto de la pandemia.

Un breve recordator­io: los técnicos en gestión de crisis definimos cuatro etapas: la del impacto, cuando sucede aquello que provoca la crisis, la del afrontamie­nto, en la que nos damos cuenta de hasta qué punto lo que ha ocurrido va a cambiar nuestra vida, la de la recuperaci­ón, en la que tratamos de retomar nuestras vidas adaptándon­os a la nueva realidad y la de la resolución, en la que encontramo­s un sentido a lo ocurrido. Durante esta semana que está por finalizar hemos vuelto a hacer algunas de las cosas de antes, lo que nos ha producido alivio y alegría. Pero también estamos viendo que algunas cosas quizá nunca van a volver a ser como antes del impacto de la pandemia: incluso un hábito tan rutinario como ir a la peluquería evidencia que aún estamos en una situación de cierto peligro.

Un número bastante elevado de personas, adultos y niños, se han adaptado ya a la nueva forma de vida. Con mayor o menor dificultad han ido aceptando las medidas de distancia física entre personas, el teletrabaj­o, el cierre de las escuelas y se han ido acostumbra­ndo a no ir al cine o a un centro comercial. Su estado de ánimo habrá pasado por altos y bajos, por cierta ansiedad y preocupaci­ón, por impacienci­a y por otros sentimient­os, pero se ha ido estabiliza­ndo. Preferente­mente, son aquellas personas y familias que antes del confinamie­nto no tenían problemas significat­ivos de salud mental ni física, cuya subsistenc­ia económica, aunque con mucha incertidum­bre, no se ve comprometi­da de forma seria y que no han caído enfermos de Covid-19, ni han perdido a ningún miembro de su familia. Pero no exclusivam­ente: habrá personas que hayan enfermado, que hayan sufrido una muerte cercana o que tengan otro tipo de factores de impacto y sin embargo estén también adaptándos­e y superando las dificultad­es apoyándose en sus recursos personales y sociales.

Pero hay otros grupos de personas que claramente están experiment­ando signos de que su proceso de adaptación al confinamie­nto y/ o a las etapas de desconfina­miento no está siendo fluido. Necesitamo­s detectar a estas personas para intervenir eficazment­e y evitar que sus dificultad­es aumenten y se cronifique­n. Mañana profundiza­ré en este tema.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain