Volver a triunfar en pantallas y escenarios tras dejar atrás el alcohol
Actores y cantantes han tenido una segunda oportunidad con el éxito después de de l b b d
Barcelona
“He coqueteado con la idea de abrazar un estilo de vida sobrio. Todavía no estoy en ese punto, pero lo pensé en varios momentos mientras grababa el álbum”, dice Lady Gaga durante una entrevist concedida a Apple Music c motivo de la presentaci de Chromatica, su últi trabajo. “Puedo ser m dura conmigo mis porque sigo bebie do o ser feliz y apr ciar que sigo viva trabajando, y senti que lo estoy hacien do bastante bien Soy imperfecta d una manera perfe ta”, añade la multi cética artista estado nidense como broc autoindulgente.
Si el lector piensa en una triz, actor o cantante que hay frido la dependencia del alcohol las drogas –normalmente, ambas adicciones son anverso y reverso del mismo problema–, le vienen a la mente juguetes rotos como Macaulay Culkin o nombres más famosos por sus excesos que por sus méritos interpretativos, com Lindsay Lohan o Charlie Sheen Otros no pudieron escalar desde e infierno, como River Phoenix Kurt Cobain, Robin Williams Amy Winehouse y hay quiene continúan en la trinchera aun como clientes habituales de centros de desintoxicación. Sin embargo, existe una notable lista de estrellas que han demostrado que con un libro en lugar de una botella sobre la mesilla de noche son capaces de brillar aún más.
Robert Downey jr. es el paradigma de actor cuyo trabajo ha sido más meritorio tras desengancharse del alcohol y las drogas. En el año 1999, confesaba lo siguiente sobre sus adicciones: “Es como tener un arma cargada, en la boca y el dedo en el gatillo, sabes que en cualquier momento se va a dispa rar pero te gusta el sabor del meta del arma”. Se lo decía a un juez Downey era adicto y para enton ces, ya había pasado por centros de
rehabilitación y la cárcel, de donla de salió con determinación de no volver jamás a aquella vida.
Si antes de dormir en prisión su dilatado currículo solo ofrece alla gún destello, serie Ally Mcbeal
le dio la oportunidad de redimirse, comenzar de nuevo y reconstruir su carrera con una sucesión de buenas elecciones: Gothika, Buebuena nas noches y suerte, Zodiac, Tropic Thunder, El solista, las dos entregas de Sherlock Holmes, El juez, las sagas de Iron Man y Avengers y otras rentabilísimas franquicias de Marvel. De despojo pasó a héroe.
La lista de artistas que han logrado superar su adicción es nutrida: Al Pacino, Kristin Davis, Gerard Butler, Gary Oldman y Samuel L. Jackhan son cosechado éximuy tos valiosos desde que dejaron de frecuentar a Baco. Britney Spears perdió el trono de princesa del pop por sus adicciones: entre 2005 y 2010 se divorció y perdió la cabey za la custodia de sus dos hijos. Fue tutelada por su padre. Le ha costaaños do regresar a los escenarios y en la gira de 2018, su equipo controlaba que no hubiese alcohol a su alrededor. Sin embargo, su esfuerzo la ha permitido llenuevo nar de el Radio City Music Hall de Nueva York.
Aunque la carrera de Brad Pitt ha sido una constante protalento, gresión de se sumergió en el whisky cuando ya era un experto en el uso recreativo de la marihuana. En los noventa la exsucesión cusa era la de papeles roque manticones le ofrecían, pero continuó tras la soberbia El club de la lucha ,lasagade Ocean’s, El cubenjamin rioso caso de Button o
World War Z. De hecho, el alcohocostó lismo le su matrimonio con Angelina Jolie. Pitt decidió revida plantearse la y frenar el ritmo de rodajes. Recuperado, ha vuelto para ganar un Oscar, por Érase una vez en Hollywood.
Otro tanto le ocurrió a Ben Afmatrimonio fleck, cuyo –con Jengarner– nifer se fue a pique por una adicción doble: alcohol y timpóquer. bas de Affleck se trató por primera vez en el 2001, después de que Armageddon y Pearl Harbor lo elevaran a niño bonito de Amécabeza rica. Con la despejada, diprotagonizó rigió y la oscarizada
Argo (2012). Pero volvió a caer y durante varios años apenas ha siinfluyente do un poco Batman. Tras un parón en el 2018, tiempo que empleó en rehabilitarse, volfuerza: vió con tres películas en menos de un año y Ana de Armas, a quien conoció en el rodaje de Deep Water, como nueva compañera de vida.