La región de Lisboa registra el pico de casos por contagio de coronavirus
La región de Lisboa y Valle del Tajo registra una incidencia de la pandemia en proporción a su población similar a la de Galicia en lo que atañe a los casos y a la de Murcia en lo que respecta a las muertes, lo que la sitúa en un nivel equivalente al de las zonas de España con menor impacto.
Sin embargo, mientras que según los datos españoles de ayer no se detectó a ningún gallego ni murciano contagiado en las últimas 24 horas, en ese período hubo 255 lisboetas a los que se les diagnosticó la Covid-19. Y no se trata de un hecho puntual, sino de la tónica de las últimas jornadas.
“Lisboa en el pico, el resto del país en la base de la montaña”. Así titulaba esta semana en su web el semanario Expresso una serie de gráficos que mostraban cómo la geografía lusa del coronavirus se ha dado la vuelta, aunque la mayor parte de los 34.693 casos y 1.479 muertos siga estando en el norte, en la región de Oporto. Desde hace un mes el área de la capital es la que registra más contagios diarios y desde finales de mayo se ha instalado en sus peores registros históricos, pese a que en el conjunto de Portugal la fase más dura, siempre menos virulenta que en España, se vivió entre el 31 de marzo y el 10 de abril. En esa época, cuando Portugal vivía su particular obsesión por reducir la curva, en Lisboa apenas se pasaba de los 200 casos nuevos por jornada, frente a los más de 300 que llegó a haber en algunas jornadas de la semana pasada.
Lisboa está aún lejos de los casi 500 diarios que tuvo la región norte en abril, pero puede aproximarse, según declaró ayer a la RTP Mário Durval, delegado de salud regional. Lo explica porque se han hecho recientemente 14.000 tests, con un especial esfuerzo en la construcción civil, en la que se han hallado varios focos.
La subida de la cantidad de fallecidos en Lisboa es inferior a la de los casos, lo que además de por los ritmos de la enfermedad se debe a que entre los contagiados hay una parte significativa de jóvenes. Así, aunque haya más ocupación en algunos hospitales de la periferia, no se observa una crisis asistencial. Las autoridades rechazan el alarmismo. El Gobierno aplazó hasta el 15 de junio el levantamiento de restricciones que ya solo pesan sobre la región de la capital, como la del cierre de los centros comerciales. Lo que sí está claro es que Lisboa va al revés del resto en la pandemia.
El área de la capital no ha llegado a las cifras que tuvo el norte en abril y las autoridades rechazan el alarmismo