El CSD tiene la palabra
Toma cuerpo la posibilidad de abrir los estadios a la afición a partir del 29 de junio
El Consejo de Ministros aprobó ayer el esperado decreto sobre la nueva normalidad sin que en el mismo se aclare aún si se permitirá el acceso de espectadores a las ligas profesionales de fútbol y baloncesto. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, explicó que el Gobierno deja la decisión en manos del Consejo Superior de Deportes (CSD), que antes de pronunciarse consultará con las patronales (Liga y ACB) y el propio ministerio de Sanidad.
En la rueda de prensa posterior al Consejo, Illa avanzó que la posición del Gobierno es “garantizar la equidad de la competición, por tanto, no puede ser que en unos sitios se haga de una forma y en otros de otra”.
La idea que maneja ahora mismo el CSD que preside Irene Lozano es permitir el acceso de un 30% del aforo a partir de la entrada en la nueva normalidad, que de no producirse ningún rebrote de la pandemia podría alcanzarse en España el lunes 22 de junio. Para ese día todas las comunidades autónomas podrían haber superado ya la tercera fase de la desescalada. Sin embargo, por ahora es más un deseo y un objetivo que una realidad porque comunidades como Madrid y el área metropolitana de Barcelona van con retraso respecto a las demás y de no recortar el periodo de duración de las fases (de dos semanas a una) el día 22 de junio estarán entrando en la tercera, y no en la nueva normalidad.
En todo caso, una vez llegada dicha tercera fase el poder de decisión pasa a corresponder a los gobiernos autonómicos, y no al central. Lo que es seguro es que el estado de alarma en vigor acaba el próximo 21 de junio porque el Gobierno se ha comprometido a no pedir más prórrogas para extenderlo una vez agotada la sexta.
De ser así, los primeros partidos con público en el estadio corresponderían a la jornada 32, aún sin horario fijado por la Liga, Ese fin de semana el Barcelona viaja a Vigo para enfrentarse al Celta y el Espanyol recibe al Real Madrid en Cornellà. A mediados de la primera semana de julio el Barcelona recibe en su estadio al Atlético de Madrid.
La prudencia del Gobierno a la hora de manejar la desescalada contrasta con las prisas de Javier Tebas, el presidente de la Liga, quien siempre se ha mostrado partidario de volver a llevar público a los estadios cuantos antes.
En su última intervención pública, el domingo por la noche, en El Partidazo de Movistar, en Vamos, Tebas recordó que no ha habido ningún caso positivo de coronavirus en los más de 2.500 tests que se han llevado a cabo entre los jugadores y entrenadores de Primera y Segunda.
Para algunos de los clubs volver a abrir el estadio a sus aficionados no solo representa una medida para congraciarse con ellos, sino que supondría un importante alivio para la tesorería, ya que no tendrían que reintegrar a parte de sus abonados ese 25% por ciento que supone el tramo de la temporada que se iban a perder.
La casuística entre los clubs es muy diferente. Hay tres, Real Madrid, Levante y Osasuna, que decidieron meterse en obras en sus estadios y que no podrán disponer de
ellos para la vuelta a la Liga. Otros, como la UD Las Palmas, en Segunda División, fue el primero en pedir el regreso de sus aficionados, pues prácticamente todos caben en el estadio de Gran Canaria. Al presidente del club, Miguel Ángel Ramírez, le cuadran los números. Tiene 11.000 abonados y un aforo de 33.000 espectadores.
A la espera de que sea oficial la fecha del regreso y el aforo, clubs como el Barcelona trabajan desde hace semanas en un protocolo para regular el retorno del público al Camp Nou. Fuentes del club azulgrana argumentan que “conocer la demanda de los socios abonados marcará los pasos a seguir”. Si la demanda supera la oferta permitida, el club se plantea realizar un sorteo para repartir las entradas, siguiendo el ejemplo de las finales.
El protocolo, elaborado con médicos y directivos del club, baraja cuatro planes de actuación. En primer lugar, un plan sanitario que trabaja las medidas de seguridad, como el uso de la mascarilla y la distancia de 1,5 metros dentro y fuera del estadio. Este plan, además, establece un protocolo de limpieza, ventilación y uso de los baños para evitar aglomeraciones .
En segundo lugar, incluye un plan tecnológico para retirar las entradas de forma digital y reducir el contacto; un plan de movilidad marcado por la operativa que dirigirá el acceso y la salida del Camp Nou de forma escalonada; y un plan social que permite estar en contacto con los socios y responder a las necesidades del público de más edad para facilitar su acceso.
El próximo viernes el club blaugrana ya tendrá el primer contacto con su afición con la apertura de las instalaciones que rodean el Camp Nou. Así, el museo, la tienda oficial del club y las oficinas de atención al barcelonista volverán a estar operativas con todas las medidas de seguridad y protección que establecen las autoridades sanitarias. Se exigirá que se respeten las distancias de seguridad y todo el personal deberá usar la mascarilla.
La tienda y el museo de la entidad tendrán un horario de visita de 10 a 15 horas de lunes a domingo. Se limitará el aforo –del 33% en esta fase 2–. Debido a las medidas y protocolos de protección, las pantallas táctiles del museo no estarán operativas; tampoco las máquinas dispensadoras de fotos y monedas ni las audioguías. Precisamente el club está preparando ampliar su aplicación con los contenidos de las audioguías para que la experiencia del cliente sea completa.
EL PLAN DEL BARCELONA
El club blaugrana estudia realizar un sorteo entre los socios para repartir así las entradas del Camp Nou
OBRAS EN LOS ESTADIOS
Real Madrid, Levante y Osasuna no podrán jugar en su campos habituales por tenerlos en obras