LA CANUDA DE MALLAFRÉ
Y después del cierre de la librería Canuda, siempre nos quedará el libro. Sí, el libro delicioso, divertido, sorprendente, pero con rigor documental, que acaba de publicar un Manuel Llanas que ha sonsacado a Santi Mallafré para que le contara las mil y una historias de tan curioso establecimiento: La Canuda i el comerç del llibre vell (edita Comanegra). El relato, que arranca ya con el padre, es cronológico e informativo gracias al rigor profesional de Llanas, acreditado especialista en el mundo del libro, pero que encima aparece aquí doblado de cliente. Destaca el colorido aportado por un Mallafré que se revela observador, irónico, pero sobre todo como un memorión notable que sabe relatar historias tan dispares. Así pues, asombra enterarse de lo que ha vivido en aquella enorme tienda enriquecida con espacios incluso misteriosos siempre inundados de libros, y también de lo que ha vivido fuera, en los pisos donde acudía a comprar. El anecdotario es regocijante. Se añade toda una lección práctica de la psicología de un vendedor honrado y de la clientela y hasta de los pillos. No falta otra lección, la del acertado mecanismo para, sin bibliofilia ni especialidades, haber logrado la buena circulación de centenares de miles de ejemplares.