Pujol vuelve al Tagamanent
Sus 90 años recién cumplidos no impidieron ayer a Jordi Pujol subir al Tagamanent. El que fuera presidente de la Generalitat entre 1980 y el 2003 no se quiso perder el acto de inauguración de las obras de restauración del conjunto monumental del antiguo castillo e iglesia de su cima, realizadas por la Diputación de Barcelona. El Tagamanent guarda un significado muy especial para el exlíder de Convergència tras ascenderlo con 10 años junto a un tío que acababa de salir de prisión. Corría el año 1940 y según ha explicado en varias ocasiones el propio Pujol asoció el ruinoso estado del conjunto monumental restaurado con la crisis que sufría Catalunya por el impacto de la Guerra Civil. Algo extrapolable al resto del territorio catalán, en gran parte visible desde los poco más de 1.000 metros de altura de la cima del Tagamanent. A partir del recuerdo de infancia el expresident forjó su línea política de “construir Catalunya”, según él siempre ha contado. Y ayer se felicitó por las vistas, una Catalunya cambiada, dijo, gracias a la contribución de muchos. Junto a Pujol ayer subieron su esposa, Marta Ferrusola, y otros familiares y amigos.