La Vanguardia

“Si eres madre de tres hijos, se acabó ser sexy, debes ponerte el burka”

- Ima Sanchís

Tengo 41 años. Me crié en Sevilla y vivo en Sant Cugat, estoy enamorada de su bosque. Casada, tengo tres

hijos, dos niños adolescent­es y una niña (3). Me gustaría fundar un partido político y que los PIGS (Portugal, España, Italia, Irlanda y Grecia) se independic­en del resto de Europa porque siempre nos usan

Soy feminista y ecologista. Medito y creo en el karma, en que uno debe dar siempre en vez de pedir. Pero me eduqué en un colegio de monjas. ¿Y cómo le fue? Todo el día preguntand­o y preguntand­o. Su madre la tuvo muy jovencita.

A los 17 años. Madre soltera. También se hizo cargo de su hermano pequeño. Nos crió juntos e intentó darnos la mejor educación, pero yo quería cantar y a los 18 años ya estaba fuera de casa, he sido una buscavidas, siempre superloca.

¿Y no lo ha pasado mal?

¡Pues claro! No he tenido padrinos. Nadie me ha ayudado. He hecho mi carrera sola. Soy muy atrevida, lo que me dice mi corazón, mi instinto, voy a por ello. He sido decidida y eso es bueno, no lo cambio, pero tiene sus desventaja­s.

¿En qué problemas se ha metido?

A día de hoy no son relevantes para mí, veo que he llevado un camino muy estimulant­e. Me he atrevido a viajar, a vivir en distintos lugares con mis hijos pequeños, me he metido en negocios y unos han ido bien y otros no. Me he aventurado.

¿Qué ha andado buscando?

Cosas nuevas. Mi abuela recogía algodón, era analfabeta, y yo me gano la vida escribiend­o. El que mi madre consiguier­a progresar y salir de Cádiz, y luego yo haya conseguido dejar Sevilla para recorrer mundo es algo muy bonito.

¿El resultado del esfuerzo de tres generacion­es de mujeres?

Sí, yo he visto a mi madre trabajar muy duro. Nunca le han gustado los caminos fáciles. Me ha enseñado a ser exigente conmigo misma y me ha dado muchos valores.

¿Qué siente?

Solo puedo sentir gratitud. Para mí tampoco ha sido fácil. Ser artista y criar hijos ha sido complicadi­to. Nos sentimos culpables y es un error.

¿Cuándo dejó de ser María?

Mala era mi nombre de guerra cuando, siendo menor de edad, era grafitera.

¿Era maluca?

Para nada. Era atrevida. Hay mucha hipocresía en la sociedad y debes pensar por ti misma para distinguir lo que está mal de lo que está bien.

Hay que ser fuerte para hacer valer el propio criterio.

Yo he continuado con ese nombre para reivindica­r que si ser mala es ser valiente, inconformi­sta, escoger por ti misma, pues sí, soy mala. Me da igual lo que otros digan.

Empezó con el rap, un mundo de hombres.

El mundo era y es de hombres, y si quieres estar en él tienes que ponerte tu traje de mujer. No ha cambiado nada, por eso soy una feminista radical y abogo por abolir la prostituci­ón.

Cuénteme.

El feminismo liberal dice que si tu quieres ganarte un dinero vendiendo tu cuerpo es cosa tuya. Error, porque el sexo está controlado por proxenetas. En Alemania hay locales de todo incluido: salchichas, cerveza y polvo.

Ya.

Ellas pagan el alquiler de la habitación y para ganarse la vida van a siete tíos por día. No creo que eso sea sano para la mente ni el alma. Más de cuatro millones de alemanes van a estos supermerca­dos del sexo a diario.

Hace falta más debate sobre el tema.

Sí, debe haber más debate social, hablar con normalidad de estos temas sin que te miren con cara de “qué dice esta mal follada”.

¿Qué momentos le han marcado?

El nacimiento de mi primer hijo (le vi las orejas al lobo) y descubrir la meditación. Entre tanto han ocurrido cosas: me separé con los niños muy pequeños, pero no soporto el victimismo. Lo mío ha sido trabajar, echar músculo.

Ganó dos Latin Grammy y desapareci­ó.

Los Grammy no cambiaron nada, seguían sin sonar mis canciones en la radio. Sé que lo mío es un camino largo, quiero aprender mucho más, así que me dediqué a experiment­ar con la música sin una mirada comercial. Viví en San Diego, en Cuba. Viajar te abre los ojos.

¿Qué ha comprendid­o?

Que tanto das, tanto recibes; y que hay que levantarse temprano.

¿Qué ha sido lo difícil?

Mirado desde hoy nada. Yo creo que todo consiste en la actitud. Pero la gente te juzga: ser madre, dedicarte a la música y encima ser un zorrón como yo, agárrate.

¿Por su manera de vestir, de moverse?

Si eres madre de tres hijos ya no puedes ir de sexy, tienes que ponerte el burka. Yo creo que el mundo ya es bastante jodido como para machacarno­s unos a otros. No sabemos nada del otro, ¿cómo nos atrevemos a juzgarlo?

...

La gente proyecta lo que lleva dentro, y por desgracia muchos llevan mucha basura dentro y la depositan en los otros. Para mí, ver qué hay detrás de la fachada, conocer a alguien, me parece una de las mejores cosas de la vida.

¿Se ha sentido criticada?

Siempre he hecho oídos sordos, lo que digan de mí me da igual, pero Sevilla se me quedó pequeña. La gente joven tiene que expresarse, no puede comportars­e como si tuvieran 50 años.

Hay que confiar en los jóvenes.

Hay que darles libertad no ridiculiza­rles. Dejemos que cada uno recorra su propio camino, investigue, se equivoque, y seremos más felices como sociedad.

 ?? ÀLEX GARCIA ??
ÀLEX GARCIA
 ??  ?? Víctor-m. Amela – Ima Sanchís – Lluís Amiguet
Víctor-m. Amela – Ima Sanchís – Lluís Amiguet

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain