Uso masivo contra otra oleada
Un estudio realizado por las universidades británicas de Cambridge y Greenwich y publicado en Proceedings of the Royal Society concluye que el uso regular y masivo de mascarillas en espacios públicos podría frenar una nueva oleada del SARSCOV-2. Sumado a la distancia social y el lavado frecuente de manos, esta medida contribuye a reducir la R, el número de reproducción del coronavirus, por lo que se evitan nuevos brotes de la enfermedad.
El trabajo señala, además, que el uso masivo de estas protecciones podría tener una efectividad igual al confinamiento de la población, puesto que limitan la difusión de partículas potencialmente contaminantes. Los investigadores también analizaron la efectividad de las distintas mascarillas y vieron que incluso las caseras fabricadas con telas, pueden proporcionar un beneficio a nivel de población al reducir la transmisión de la enfermedad.