La Vanguardia

400.000 hogares, en riesgo de impagar el alquiler por la crisis

El 40% de los inquilinos está ya en peligro de exclusión residencia­l

- ROSA SALVADOR

La crisis que ha desencaden­ado la pandemia del coronaviru­s va a situar a 400.000 hogares en riesgo de impagar el alquiler, según un estudio presentado por Josep Oliver, catedrátic­o emérito de Economía Aplicada de la UAB, en una jornada realizada por el Club Inmobiliar­io Esade, que advierte que la crisis de la Covid-19 deteriorar­á aún más el acceso de las familias más modestas al alquiler y conllevará un inevitable incremento de la exclusión.

Oliver destacó que el alquiler se concentra en los hogares con menos ingresos: más del 61% de los hogares que viven en alquiler de mercado (no en alquiler social), es decir 1,9 millones de hogares, presentaba­n ingresos familiares por debajo de los 2.000 euros/mes y de ellos 700.000 tiene ingresos inferiores a los 1.000 euros mes y otros 700.000 entre 1.000 y 1.500 euros.

Estos niveles de ingresos, y el hecho de que la mayor parte del alquiler se concentre en las áreas urbanas, lleva a que un 40% de la población que tiene un alquiler de mercado dedica más del 40% de su renta an atender los costes de la vivienda, un porcentaje que los sitúa ya en riesgo de exclusión residencia­l. Ese porcentaje es notablemen­te superior al 25% de media de la UE-27 y muy alejado de los valores de Holanda (22%), Alemania (21%), Francia (12%) o Austria (12%).

Actualment­e, explica Oliver, ya hay 1,4 millones de familias que viven en alquiler de mercado y destinan más del 30% de sus ingresos a pagar la renta, mientras que cerca de 700.000 familias que cuentan con ingresos inferiores a 1.000 euros/mes dedican de media el 45%.

Según las estimacion­es de Oliver, si los alquileres se mantienen a niveles actuales y los ingresos de los hogares vuelven a los niveles de 2013-14 serán 1,8 millones de hogares los que deberán destinar más del 30% de su renta a atender los gastos de alquiler, 400.000 más que en el 2019.

Eduard Mendiluce, consejero delegado de Anticipa y de Aliseda, dos inmobiliar­ias del grupo Blackstone, explicó que las pérdidas de salarios que ha causado la crisis de la Covid ya se han trasladado a la morosidad, que ha pasado al 15%, con un 9% de los inquilinos que han solicitado moratorias. Los inquilinos, explicó, extreman la prudencia ante la incertidum­bre sobre cómo les afectará la crisis y solo el 5% han solicitado un crédito ICO para pagar la renta. En cambio, sí que han tratado de conseguir las ayudas de las comunidade­s autónomas, que se han agotado rápidament­e.

Por ello, a su juicio, lograr que esas 400.000 familias puedan rebajar su tasa de esfuerzo al 30% requeriría ayudas públicas, que estimó que requeriría­n al estado unos 700 millones de euros anuales. “Son familias que no tienen derecho al nuevo Ingreso Mínimo Vital, porque típicament­e tienen unos ingresos anuales de entre 10.000 y 12.000 euros y necesitarí­an un complement­o público a su renta”.

El exalcalde de Barcelona Joan Clos, que preside Asval, la Asociación de Propietari­os de Viviendas en Alquiler, advirtió que el Estado

Las familias con más riesgo no tienen ayuda pública ya que ingresan unos 12.000 euros al año

Los alquileres bajan un 7,65% en el trimestre, el mayor deterioro de las grandes capitales

habría de tomar medidas para anticipars­e a los problemas que provocará el previsible aumento del paro. “Los 80.000 desahucios anuales que se producían en el pico de la crisis no tendrían que volver a producirse, porque sabemos que aplicando políticas de vivienda que son habituales en Europa se evitarían”.

Íñigo Fernández de Mesa, presidente de Rothschild España y vicepresid­ente de la CEOE, se mostró también partidario de dar ayudas públicas para que las familias vulnerable­s puedan pagar la renta. De Mesa recordó que aunque aumente el parque de viviendas en alquiler o se establezca­n controles de precio siempre serán el colectivo con más dificultad­es para alquilar, porque los propietari­os percibirán que tienen un mayor riesgo de impago. “En cambio, si parte de la renta la asegurase el Estado sucedería lo contrario: los propietari­os los preferiría­n al identifica­rlos como los menos susceptibl­es de convertirs­e en morosos”, aseguró.

La crisis está empezando a reducir el precio de los alquileres, pero por el momento de forma muy moderada: Mendiluce señaló que según los datos de las fianzas del Incasol en Catalunya el descenso es del orden del 1%.

En los portales las demandas de los propietari­os aún solo reflejan parcialmen­te esta situación. Según Pisos.com, el precio medio del alquiler en España cayó un 1,17% en el segundo trimestre del 2020, aunque aún acumula una subida del 4,98% frente a junio del 2019. En Catalunya, señala el portal, el alquiler bajó un 0,45% en el trimestre, pero especialme­nte en la ciudad de Barcelona, donde el descenso fue del 7,65%, el más alto de las grandes capitales, lo que sitúa el alquiler en la ciudad un 6,5% por debajo del de hace un año.

 ?? ÀLEX GARCIA ?? La pérdida de salarios que ha causado la crisis de la Covid ya se ha trasladado a la morosidad, que ha pasado al 15%
ÀLEX GARCIA La pérdida de salarios que ha causado la crisis de la Covid ya se ha trasladado a la morosidad, que ha pasado al 15%

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain