Caixabank gana menos por las provisiones
El beneficio se sitúa en 205 millones de euros hasta junio
Los efectos de la pandemia se reflejaron yer en la cuenta de reenefisultados de Caixabank igual como en el resto de entidades financieras. Caixabank ganó 205 millones de euros en el primer semestre del año, un 67% menos que en el mismo periodo del 2019 como consecuencia de las provisiones realizadas para hacer frente a los efectos de la pandemia. En una rueda de prensa telemática desde Barcelona, el consejero delegado Gonzalo Gortázar descartó entrar en pérdidas en el conjunto del año a diferencia de otros bancos del país.
La pandemia ha acelerado en boca de los supervisores bancarios, gobiernos y analistas la necesidad de que la banca española entre en una nueva ronda de consolidación con fusiones. En relación con ello, Gortázar aseguró que “desde luego que podemos salir sin ninguna operación corporativa” de la situación de recesión por la que atraviesa España. El consejero delegado de la entidad añadió que no van a estar proactivos en la búsqueda de una fusión pero que si tuvieran que analizar alguna operación lo harían.
“Con nuestro tamaño tenemos mucho que hacer y no nos hace falta una operación corporativa para hacer más cosas”, sentenció. El ejecutivo justificó su apuesta por que la entidad siga sola en el hecho de haber conseguido un aumento del volumen de negocio (recursos de clientes más créditos) del 5% en plena pandemia.
Desde que comenzó el confinamiento, la entidad ha concedido 32.500 millones de euros de financiación al sector empresarial sin contar con las líneas ICO (Instituto de Crédito Oficial) puestas en marcha por el Gobierno. En cuanto a la financiación con el apoyo del ICO, la entidad gestionó 164.000 solicitudes de préstamos por un importe total de 13.723 millones de euros.
En estos meses, el banco –como el resto del sector– ha llevado a cabo una política de moratorias de créditos a sus clientes para reducir la carga que soportaban en los momentos más duros del confinamiento. El banco concedió un total de 357.488 solicitudes de moratoria de sus clientes en España, que afectan a una cartera de 9.848 millones de euros. El grueso de la moratorias (70%) fue en préstamos personales pero si se tiene en cuenta el importe la parte más importante (86%) correspondió a créditos hipotecarios.
Todas estas medidas permitieron mantener contenida la morosidad en el 3,5%. Cara al futuro, Gortázar estimó que la tasa podría crecer hasta el 4 o el 5% a finales de año.
En cuanto a las provisiones, la entidad después de la dotación de 400 millones realizados durante el primer trimestre del año, en el segundo la entidad ha realizado otra de 755 millones. En total son 1.155 millones en los seis primeros meses de año.
Cuando se analiza la cascada de resultados trimestrales se comprueba como la entidad sólo declara haber pagado 1 millón de euros de impuesto de sociedades en el periodo. Gortázar explicó que esa circunstancia se debe a que la entidad ya pagó impuestos sobre los 200 millones percibidos vía dividendos.
En relación con las previsiones, Gortázar aseguró que obviamente los objetivos de rentabilidad previstos en el nuevo plan estratégico de la entidad, presentado el pasado año, no se van a cumplir. En cuanto al dividendo, la idea de Gortázar es repartir el próximo año con cargo al ejercicio 2020 ya que confía que se levantará el veto puesto que entiende que era una medida temporal.
El volumen de negocio del banco crece un 5% en plena pandemia