A la Fiscalía un local cántabro con empleados contagiados
El Gobierno de Cantabria trasladará a la Fiscalía un acta para denunciar a un restaurante de Comillas en el que cinco trabajadores han dado positivo por Covid-19 y otros siete empleados –que también estaban trabajando– son contactos estrechos, y donde la Guardia Civil detectó actividad pese a que tenían que haber estado aislados.
El consejero de Sanidad de Cantabria, Miguel Rodríguez, explicó ayer que, aunque los trabajadores de este restaurante tenían que hacer aislamiento como medida de prevención, la Guardia Civil detectó actividad el miércoles, con nueve de ellos en el local, motivo por el cual levantó acta que se trasladará a la Fiscalía.
“No cumplir el aislamiento cuando uno es positivo, y más en el caso de trabajadores que atienden al público, podría ser constitutivo de delito contra la salud pública”, ha advertido Rodríguez, que ha añadido que, a su vez, en Salud Pública se tramitará un expediente sancionador.
Además, el titular de Sanidad de Cantabria ha recordado que el protocolo a nivel nacional establece que los contactos estrechos de un contagiado deben someterse a una prueba PCR para determinar si son o no positivos en Covid y han de mantenerse en cuarentena hasta que esté el resultado, ya que a veces un test que inicialmente da negativo “se positiva más tarde”. Por eso, se recomiendan diez días de cuarentena.
En Cantabria en este momento hay 12 brotes activos, mayoritariamente “intrafamiliares”, relacionados con reuniones o celebraciones en las que han participado personas no convivientes. Ninguno de más de diez personas, y hay dos que no son consecuencia de reuniones familiares: el de la residencia de Liencres (Piélagos) y el del restaurante de Comillas.