Plácido regresa a Europa decidido a limpiar su nombre
El tenor recoge un premio a su carrera en pleno aeropuerto de Salzburgo
Plácido Domingo ha regresado a Europa para recibir el premio del Teatro Musical Austriaco a su trayectoria, que le fue entregado ayer en Salzburgo. No en el festival, ni siquiera en la ciudad: fue en el aeropuerto donde se extendió la alfombra roja que el tenor pisó sonriente, del brazo de su esposa.
La estrella operística tenía previsto actuar en el Festival de Salzburgo en esta edición del centenario, debutando en el papel de Guy de Monfort en Les vêpres siciliennes, pero la pandemia lo ha hecho imposible. Ese premio es así un espaldarazo al cantante que este último año ha protagonizado un escándalo en el mundo de la ópera.
Fue justo en agosto del 2019 cuando saltó la noticia: una docena de mujeres –en septiembre una veintena– revelaban en Estados Unidos que habían sido víctimas de acoso sexual y abuso de poder por parte del tenor en el entorno laboral. Meses después, justo antes de la pandemia, una investigación llevada a cabo por el sindicato de artistas musicales de EE.UU. daba por válidas las acusaciones. Y si antes Plácido Domingo había dicho que eran acusaciones “tan imposibles como inconcebibles”, hablaba entonces de asunción de responsabilidades por las acciones denunciadas. Pedía disculpas.
Semanas después, el tenor daba positivo en Covid-19. Y según explica en una entrevista con el rotativo italiano La Repubblica, cuando “me enteré de que tenía Covid, me prometí a mí mismo que si salía vivo, lucharía para limpiar mi nombre”. Plácido insiste en que “nunca abusé de nadie, lo repetiré mientras viva”, y dice haber cambiado: “Ya no tengo miedo”.
Domingo ha preferido los medios italianos porque “Italia está preparada para abrazarle de nuevo”, dice, ya que ha celebrado sus 50 años de carrera tanto en La Scala como en la Arena di Verona.
Superado el encierro del virus en Acapulco (México), Domingo cuenta que ha sido un milagro recuperar la voz y que temió no volver a cantar. Pero lamenta que el eco mediático le haya “desestabilizado”, a él y a su familia. “Me han hecho más daño que el virus”. En la entrevista afirma que si mira atrás no ve situaciones en las que haya dejado heridas abiertas. “Si
“He cambiado; ya no tengo miedo”, ha declarado el cantante en una entrevista a ‘La Repubblica’
me hubiera dado cuenta de que había ofendido a alguien, especialmente a una mujer, habría intentado remediarlo”, dice. “Ahora solo puedo tomar conciencia de que no podré cantar en EE.UU. y España y no por la decisión del público, que sigue enviándome mensajes de solidaridad”.
El ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, manifestó ayer que “cuando se cometen actos graves y se asumen, eso tiene consecuencias en la vida publica y social”.