La Vanguardia

Como un fado

Se caen, se levantan, riman un verso futbolísti­co, marcan y sufren: Messi y el Barça

- JUAN BAUTISTA MARTÍNEZ

Son las 20.45 horas de la tarde-noche. Los jugadores del Barça arman el corrillo habitual al final del calentamie­nto. La voz cantante la toma el capitán del equipo, Messi. Gesticula y habla. Es un discurso corto. Nunca ha sido Leo de hablar mucho aunque cada vez lo hace más y sigue subiendo el pan. Se le ve muy metido, archimotiv­ado. A los 33 años no le quedan infinitas Champions por jugar. El sueño es tan cercano como complejo. Apenas unos pocos partidos separan al conjunto, y también a los rivales supervivie­ntes, del trofeo más preciado. Pero la línea es muy fina, el Barça ha dado muestras de su insegurida­d y cualquier desliz sería fatal.

Por eso hay días en los que Messi primero estudia y después interviene, o no. Noches en las que sabe que puede medio dormitar antes de aparecer para definir. Y partidos en los que sale a marcar la línea, especialme­nte en el Camp Nou y en la ronda de octavos de final, un cruce que siempre se le da de perlas.

No marca el primer gol. Para eso está, elevándose al cielo, el bueno de Clémente Lenglet. Otro hombre silencioso. Un futbolista honrado, profesiona­l, serio. La antítesis del rebelde Arthur. Inaugura su casillero de goles en la Champions con el Barça. Cuando juega, que es casi siempre, suele cumplir. Cuando no lo hace, no se queja.

El gol alivia al Barcelona y Messi lo celebra todavía más que Lenglet, al que se le tira encima, como si se tratara de un juvenil en su primer envite de esta categoría.

Pero Messi suma 114 goles en la máxima competició­n continenta­l y apenas unos minutos después logrará el 115. Con sello propio. Cayéndose y levantándo­se. Con suerte y con ingenio. Con fortuna y con genio. Recupera la verticalid­ad, amaga y coloca el cuerpo cayéndose para encontrar la forma de armar el disparo. Inapelable. Impresiona­nte.

Durante un rato no se juega un Barça-nápoles, sino que lo que se ofrece en el Camp Nou es un monográfic­o de Messi. Utilizando un símil taurino, algo que ya no está en boga, es verdad, sería como cuando el cartel de la corrida ofrecía un solo matador y se decía, seis toros, seis, para el diestro. Aunque el argentino sea zurdo. Baja otro balón del aire y lo emboca. Otro señor gol. Pero ahí está la dichosa tecnología para revisar infinitas repeticion­es hasta hallar una mano que, ciertament­e, si la hubo, estaba muy bien escondida. No hay gol, pero sí penalti más tarde. ¿Sobre quién? Sobre Messi, al que patean con rotundidad y lo dejan temblando.

Lisboa se antoja más cerca, a la vuelta de la esquina, a un solo fado de Amália Rodrigues de distancia. Espera el Bayern, el temible Bayern, donde anda cedido un tal Coutinho. Pero el billete invita a imaginar, a luchar, a pensar y a confiar en Messi. Él solo no podrá. Pero sin él sería imposible. No ya ganar la Champions, sino siquiera haber llegado hasta la fase final.

Si los partidos duraran solo 45 minutos, el Barça, y Messi, tendrían más argumentos para creer porque no va sobrado de oxígeno y sus piernas tienen más kilómetros que las de aquellos ciclistas que se atrevían con las tres grandes vueltas. Pero en este 2020 extrañísim­o todo es posible. Incluso que este Barcelona crepuscula­r aspire a ganar la Champions, aunque por su lado del cuadro estén el Bayern y el City.

De hecho, solo los barcelonis­tas y los bávaros saben lo que es tener el trofeo en sus vitrinas de entre los ocho equipos clasificad­os para los cuartos de final. El Barça y Messi son como un fado en este tramo de sus carreras. Se caen, se levantan, son bellos a ratos y sufren cuando las piernas fallan.

Messi arengó al equipo antes de empezar y lideró el discurso futbolísti­co mientras tuvo fuerzas

De los clasificad­os para Lisboa solo el Bayern y el Barcelona saben lo que es ganar la Champions

 ?? ENRIC FONTCUBERT­A / EFE ?? Lionel Messi, en posición acrobática, anoche en el Camp Nou
ENRIC FONTCUBERT­A / EFE Lionel Messi, en posición acrobática, anoche en el Camp Nou
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain