Binder sorprende a los favoritos y alivia a Marc Márquez

El triunfo de Binder y la rebelión de los modestos evitan que se fugue más Quartararo, 7.º

En el sofá de su casa de Cervera, con el brazo convaleciente de su segunda operación del húmero, Marc Márquez debía respirar aliviado al ver la clasificación final del GP de la República Checa. Seis pilotos se aliaron con su causa y evitaron que Fabio Quartararo se escapase aún más en el liderato del Mundial. Solo pudo sumar 9 puntos el francés, que fue superado por la algarabía de los más modestos de la parrilla, con un sorprendente y bravo Brad Binder (KTM) al frente, ganador tan inesperado como merecido.

Sin Marc Márquez en pista por segunda carrera seguida, Motogp se asemeja a Moto3: no hay guion, cualquiera la puede liar. La cita de Brno dio un vuelco a todas las previsiones; las jerarquías saltaron por los aires. Así, falló el líder Quartararo (7.º), los actores secundarios se reivindicaron, con un novato como Binder ganando con autoridad, con Franco Morbidelli liderando media carrera y acabando segundo, y con un piloto satélite, Zarco, tercero, con una moto del 2019... Y, a todo esto, con los supuestos aspirantes a pelear el título con Marc, descolgados, totalmente desaparecidos: Maverick

Viñales, 14.º, Andrea Dovizioso, 11.º, y el propio Quartararo, encogido, cauto, desconocido respecto al que se vio en Jerez.

Todo a pedir de boca para un Marc Márquez que ve retrasada su reaparición para comenzar la remontada. Por de pronto, Honda ya ha anunciado que el 93 no volverá en el siguiente Gran Premio de Austria (14-16 de agosto).

En una carrera del revés, con los favoritos lejos de los puestos de honor y los modestos llevando la iniciativa, Morbidelli y Binder se turnaron en el protagonismo. Primero fue el italobrasileño quien abrió pista, desde la salida, aprovechando el mal arranque del poleman Zarco –la Ducati le hizo un caballito– y el susto de Quartararo, que casi se va al suelo evitando el toque con Aleix

Espargaró. Morbido se creció, llegó a acumular segundo y medio de renta sobre Quartararo y fue capaz de liderar 12 de las 21 vueltas.

En ese punto le tomó el relevo un Brad Binder que, en su tercera carrera en la clase de los mayores, se dio a conocer al mundo con una actuación sólida y de carácter. El sudafricano, que mañana cumple 25 años, realizó una progresión inau

dita sobre una KTM que iba como un tiro: arrancaba 7.º, pasó a Rins y Zarco en la salida, en la segunda vuelta ya era 3.º, se quitó del medio sin manías a Quartararo en la novena vuelta y en la 13.ª dio buena cuenta de Morbidelli con un zarpazo limpio. A partir de ahí, el novato cabalgó hacia su primera victoria.

Por detrás, los puestos de podio quedaron definidos para Morbidelli

y Zarco –vuelve a un cajón dos años después (Malasia 2018)–, que firmó una soberbia actuación, en especial defendiendo el tercer puesto ante Quartararo al incorporarse de la vuelta larga de castigo. El de Ducati puso en evidencia la debilidad ayer del Diablo.

Hasta 6 pilotos –Binder, Morbidelli, Zarco, Rins, Rossi y Oliveira– adelantaron a un Quartararo en modo conservador, que no quiso arriesgar para evitar una caída. “Ha sido una tortura. No esperaba que mis gomas se degradasen tanto. Iba al límite de la primera a la última vuelta, así que puedo estar contento de haber acabado sobre la moto y con 9 puntos”, dijo el francés, que suma 59 puntos sobre Márquez.

REGRESO APLAZADO Márquez no volverá en el siguiente GP de Austria (16 de agosto) y acumula una desventaja de 59 puntos

QUARTARARO, CONSERVADOR “Ha sido una tortura, puedo estar contento de haber acabado sobre la moto y con 9 puntos”