La letalidad del coronavirus baja al 0,29 por ciento
Durante el pico de la pandemia se alcanzó el 14% de los infectados
El esfuerzo de las comunidades autónomas en aumentar su capacidad de detección de Covid-19 en las dos últimas semanas está haciendo aflorar un mayor número de casos positivos, en su gran mayoría asintomáticos, por lo que la letalidad del virus ha descendido drásticamente, situándose en el 0,29% sobre el total de contagiados. Esta cifra se acerca la que seguramente es la “letalidad real del virus”, según el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.
“Los grupos infectados son más jóvenes, con casos asintomáticos, por lo que la tasa de letalidad se ha reducido progresivamente desde el pico de la pandemia”, hace dos meses, en que fallecía entre el 13% y el 14 % de los pacientes.
Para Simón, la modificación de la edad media de los contagiados gracias a la extensión de pruebas diagnósticas (actualmente, más del 70% de los positivos detectados tienen menos de 30 años) no debe relajar al sistema pues la población mayor de 65 años sigue siendo la más vulnerable. “En estas edades se dispara dramáticamente al 16% y 17% y por eso tenemos que seguir vigilantes”, manifestó Simón, que avaló las medidas de precaución que se están tomando en las residencias de ancianos.
“No obstante, por muy protegidas que estén, existen riesgos porque los trabajadores tienen familias y amigos y pueden infectarse y transmitirlo a los residentes por muchos esfuerzos que hagamos para evitarlo”, advirtió Simón.
En Aragón, las cifras de fallecimientos durante el fin de semana se elevaron a 38, casi la mitad del conjunto español (65 en total) y se debió, mayormente, a centros de mayores afectados. Otra vía de contagio a los mayores es la relajación en las medidas de prevención de la población (manos, mascarillas y distancia social) cuando se encuentran con grupos de personas con los que no conviven. “Hoy familia, mañana amigos, otro día otro grupo de amigos y así se actúa de amplificador del virus. Es verano y hay más relajación pero hay que extremar las precauciones”.
El Ministerio de Sanidad comunicó ayer un total de 8.618 casos positivos durante el fin de semana, de los que 1.486 se diagnosticaron en las últimas 24 horas, con lo que ya son 322.980 los infectados desde el comienzo de la pandemia.
Los fallecimientos ascienden a 28.576. Las comunidades con más casos diagnosticados acumulados son Catalunya, que está en fase de control y descenso del número de contagios, Aragón (que no ha doblegado la curva) y Andalucía, donde se están triplicando los casos. Madrid también preocupa con focos en varios barrios y en residencias.
El director del centro de coordinación se mostró optimista respecto a estos datos que permiten esperar una transmisión del virus controlada antes de que se pro
El control de la situación en ciudades de riesgo como Barcelona confirma que las medidas funcionan
duzca la vuelta al trabajo y la escuela. “El plan de respuesta temprana se está aplicando y funciona”, dijo, “hay que ver qué pasa en las dos próximas semanas” añadió. Destacó especialmente el descenso de casos en el área metropolitana de Barcelona, una ciudad que, como Madrid, tiene características de mayor riesgo que el resto de ciudades.
Actualmente, se están realizando un promedio de unas 47.300 PCR diarias. El aumento de pruebas de diagnóstico rápido permiten detectar los síntomas antes de que la persona empiece a contagiar por lo que se puede aislar y así “nos adelantamos un poco a la epidemia”. En este sentido afirmó que las comunidades autónomas están realizando un trabajo de control “excelente”.
El Gobierno es partidario de los confinamientos locales y respalda a las autonomías con informes. “Desde mi punto de vista, y no soy juez, prácticamente todas las decisiones están bien fundamentadas y son aceptadas, solo unas pocas han sido rechazadas por los jueces, quizás por falta de justificación en la medida”.
Rechazó una modificación legal para permitir a los gobiernos autonómicos confinamientos sin justificación judicial porque atenta a derechos fundamentales de los individuos. En este sentido apeló a la concienciación de la sociedad. En algunas localidades españolas se ha ordenado a la policía local que vigile los movimientos de los positivos y sus contactos.
Fernando Simón se mostró partidario de la auditoría sobre la gestión de control de la epidemia que un grupo de expertos ha solicitado. El Gobierno es el primer interesado, dijo, “es obvio que hay que evaluar”, El examen podría producirse antes del otoño si la epidemia está bajo control y los médicos no están sobrecargados y pueden colaborar con los auditores. “No es fácil, hay que fijar el marco de referencia de la evaluación y encontrar a los técnicos expertos adecuados”.