Grupos completos y mascarilla en los pasillos
El curso ha comenzado ya con carácter presencial y aspiración de normalidad en 9 de los 16 länder de Alemania, país federal en el que cada land programa las vacaciones escolares en distinta fecha, sin que la pandemia del coronavirus tenga pues nada que ver con la vuelta al cole escalonada. En general, el sistema se basa en lecciones a grupos de convivencia estable con la clase completa (se acabaron los grupos reducidos que había en las clases presenciales parciales antes del verano), sin mascarilla dentro del aula, que sí es obligatoria para todos en los pasillos. Pero en Renania del Norte-westfalia, land muy tocado por el virus, alumnos y maestros deben llevar mascarilla también dentro de su aula, y solo los niños de 1.º a 4.º están exentos.
En Berlín, ciudad con rango de land, el curso empezó el 10 de agosto, y según cifras oficiales, en 37 de los 825 centros de primaria y secundaria de la capital se han dado casos de coronavirus, por lo que una parte de ese alumnado y profesorado ha sido puesto en cuarentena. En toda Alemania, la autoridad sanitaria regional decide cómo actuar en función de cada brote y escuela. Según cálculos del Berliner Zeitung, en Berlín hay docenas de maestros y cientos de escolares
en cuarentena. Muchas familias y analistas en prensa juzgan laxas las reglas escolares antivirus en la capital, y de hecho algunas escuelas berlinesas han decidido por su cuenta la obligatoriedad de la mascarilla dentro de sus aulas.
En Renania del Norte-westfalia, el land más poblado del país, hay 2,5 millones de niños y adolescentes y 5.500 centros escolares. Las clases empezaron el 12 de agosto, y la prensa local habla de diversos casos de Covid-19, de varias escuelas cerradas y de cuarentenas, pero no hay aún estadísticas oficiales concluyentes. Todo esto coincide con un repunte de contagios en Alemania: el Instituto Robert Koch (RKI) informó ayer de 2.034 casos en 24 horas, el mayor repunte desde finales de abril.