EL DIETARIO DE ‘EL MÓN’

Semana 2: Marta Rovira desde Suiza y Carles Puigdemont desde Bélgica, el inicio de Nissaga de poder en 8tv, el secretario de Salud Pública Josep Maria Argimon y el director de cine Achero Mañas y su amistad con Juan Marsé

LUNES

Marta Rovira

Una semana antes de que Marta Rovira se fuera a Suiza comí con ella en un restaurante de Gràcia. Era la primera vez que lo hacía. Siempre me había parecido una copia femenina de Oriol Junqueras y aquel día me di cuenta de que no había acertado en la comparación. En todo caso era al revés: Junqueras, una copia masculina de Rovira. Fuerte, firme, segura, Rovira cuando habla por la radio no tiene pánico a que le salga un titular por la boca. Se excede en las explicaciones, pero responde con intención. Es hábil en la entrevista y sabe responder sin parecer postiza. Uno ha tenido la sensación de que, al margen de la injusta situación que vive, se apartó un tiempo del ruido político. Para ERC sería bueno que tomara más protagonismo. En el futuro va a ser un pilar importantísimo.

MARTES

Josep Maria Argimon

Primera entrevista con el secretario de Salud Pública de la Generalitat y la sensación global es que se explica, se entiende y no camufla. Argimon habla meditando las respuestas. En el estudio (mascarilla, distancia de seguridad, gel hidroalcohólico .... ) habla del futuro inmediato: en dos meses no habrá confinamiento general y la vacuna ya veremos cuando llega. Lo contesta todo, pero, cuando le pedimos que ejerza más de futurólogo que de médico, se aparta de la respuesta. Nos pasa una lista de virólogos para que la audiencia sepa como se comporta realmente el virus. Llamamos a uno de ellos: Tomás Pomerola del hospital Vall d’hebron. Recuperen las dos conversaciones en Rac1.cat. En síntesis: el virus es más contagioso que en marzo, pero menos virulento.

MIÉRCOLES

Achero Mañas

El director de las magníficas El Bola o Noviembre estrena película este viernes, Un mundo normal. Al final de la película hay una dedicatoria donde leemos “a mi madre, que tiró la televisión por la ventana”. Es verdad. Cuenta Achero que un día, harta de que sus cuatro hijos estuvieran enganchados a la pantalla, cogió la televisión y les dijo: “Estoy hasta las narices de que sólo miréis este aparato, cuando hay muchas cosas por hacer”. La televisión, de las antiguas de tubo, explotó al contactar con el suelo. La suerte es que la familia de Achero vivía en una planta baja. Achero también recuerda rodajes de películas y de series en Barcelona, donde vivió un año e hizo grandes amigos, entre los cuales la família Marsé, a través de la hija del escritor, Berta.

JUEVES

Carles Puigdemont

Siempre me pongo corbata cuando recibo a un presidente o a un expresidente. Hoy, no. Camisa y punto. No pensaba que nos veríamos. Los técnicos de la radio han instalado una conexión jitsi en el ordenador y hemos podidos vernos. Nosotros desde Barcelona, Puigdemont desde Bélgica. Él me ve con el fondo del estudio 1 de RAC1, y yo, con corbata azul y delante de una bandera catalana y una europea. Me sorprende cuando hablamos de Junqueras: observo a Puigdemont haciendo un gesto que jamás le había visto antes: sopla hacia arriba y se levanta el pelo del flequillo. Curioso. Hablamos del libro que ha salido precisamente hoy a la venta, La lluita a l’exili. En un momento dado le pregunto si ha pensado que quizás no podrá volver nunca a Girona. Dice que sí y se emociona.

VIERNES

Eulàlia Montsolís

Hace cinco días que 8tv ha repuesto Nissaga de poder, la exitosa serie de sobremesa que estrenó TV3 hace más de dos décadas. El lunes hablamos de ella en El món a RAC1. La historia de la familia Montsolís a debate con dos de los malos malísimos: Amadeu Cabanilla,s que interpretó David Bagés ,y Fèlix Montsolís, metido en la piel de David Selvas. Hablamos también con Jordi Raspall, el propietario de la finca del Penedès donde se rodaron los exteriores de la serie. Explica que llegaban autocares de gente deseosa de ver la casa de Nissaga de poder. Gente que se colaba incluso en el interior. Fue un horror. La misma tarde del lunes Raspall llama a RAC1 pidiendo que dijéramos a la gente que, por favor, dejara de ir a la casa. Otra vez les ha pasado. Ha sido reponerla, hablar de ella y volver las visitas.