ESCAPADA MASIVA DEL PUENTE DE LA MERCÈ
Cuatrocientos sesenta mil coches salieron del área de Barcelona el miércoles y el jueves por el puente festivo de la Mercè. Esta salida masiva, un 15% superior a la cifra prevista, se realizó pese al llamamiento de las autoridades a evitar desplazamientos. Los destinos de este éxodo han sido zonas de montaña y playas como la de Calella de Palafrugell (foto), que ayer acogió a muchos bañistas.
Pese a la recomendación oficial de limitar los desplazamientos todo lo que se pueda, un total de 460.000 vehículos salieron de Barcelona y su área metropolitana entre la tarde del miércoles y la mañana del jueves en el arranque del puente de la Mercè. Este éxodo, un 3,5% superior al del 2019 y un 14,8% por encima de lo que el Servei Català de Trànsit preveía, se está notando en muchos puntos de Catalunya, tanto de la costa como del interior.
Los que eligieron el litoral tanto hacia el norte como hacia el sur han encontrado sol, pero un viento muy fuerte y temperaturas claramente más bajas que las de los días anteriores. Con todo, la afluencia a las playas ha sido notable, como se aprecia en la foto, en Calella de Palafrugell.
La montaña también ha recibido muchos visitantes. El puente coincide con las primeras nevadas importantes del recién estrenado otoño –en algunos puntos, las más cuantiosas de un septiembre desde hace años– y una caída de las temperaturas. También se han visto buscadores de setas primerizas, muy esperadas tras las últimas lluvias.
Caso especial es el de la Cerdanya, donde el riesgo de rebrote se ha disparado. El conseller de Interior, Miquel Sàmper, dijo en Catalunya Ràdio que la ciudadanía “ha respondido bien” al llamamiento para evitar una salida masiva hacia esta comarca e indicó que el alcalde de Puigcerdà, Albert Piñeira, le había informado de que se había desplazado “menos gente” a la zona.