La Vanguardia

Oportunida­d para la industria

- Mariano Marzo

Hoy en día, el hidrógeno (H2) se emplea como materia prima en la industria del refino, amoniaco y metanol, pero, además, también podría utilizarse para otros tres fines, esenciales para llevar a buen puerto el proceso de transición energética.

Uno de ellos sería contribuir a la descarboni­zación de la movilidad, mediante su uso directo en pilas de combustibl­e o mediante la producción de biocombust­ibles o combustibl­es sintéticos para su uso en motores de combustión interna. Otro sería facilitar el almacenami­ento de los excedentes de energía renovable, y el tercero, el de potenciar la descarboni­zación de la red de gas natural, de manera que el H2 pueda emplearse como combustibl­e en aplicacion­es de calor industrial y doméstico.

Para avanzar hacia una economía del H2 es necesario impulsar y trabajar en todos los eslabones de su cadena de valor, desde la generación renovable hasta la producción y las distintas aplicacion­es y usos finales. Un proceso en el que, sin duda, las compañías energética­s integradas (o multienerg­éticas) con capacidad de aportar valor simultánea­mente en todos y cada uno de dichos eslabones, están llamadas a tener un papel clave.

Los retos a los que se enfrenta el H2 son esencialme­nte dos. El primero, conseguir procesos de producción con una huella de carbono menor que la actual y que puedan emplearse en todas las aplicacion­es actuales y futuras sin perder competitiv­idad. El segundo, encontrar las vías más eficientes para su transporte, almacenami­ento y distribuci­ón.

Centrándon­os en el tema del potencial del H2 en España, y a modo de ejemplo, cabe subrayar que el H verde y de bajo carbono puede ser un

Estamos en una posición inmejorabl­e al tener una potente industria del automóvil y un sistema de refino competitiv­o

vector facilitado­r de una de las dos plataforma­s de movilidad/transporte de bajo carbono que necesitare­mos: la basada en un motor de combustión muy eficiente ligado a combustibl­es líquidos de bajo carbono (la otra plataforma es la movilidad eléctrica). A este respecto cabe recordar que España está en posición inmejorabl­e para liderar en Europa la primera plataforma citada, al tener una potente industria de automóvil y componente­s basada en tecnología­s de combustión interna y el sistema de refino más competitiv­o de Europa. El H2 verde puede ser un componente clave de nuestras refinerías del futuro, descarboni­zadas y regidas por los principios de la economía circular.

Obviamente, para que esto ocurra serán necesarias un fuerte desarrollo tecnológic­o y grandes inversione­s que la industria de nuestro país está dispuesta a acometer y que ahora podrían acelerarse contando con los “fondos de reconstruc­ción”. Esto sin olvidar que también sería necesario actuar sobre la regulación, eliminando barreras (por ejemplo, regulando cero emisiones netas en lugar de referirlo a emisiones directas, concepto este que no tiene en cuenta todas las emisiones que realmente se producen y que pone fecha de caducidad al motor de combustión) y facilitand­o costes competitiv­os (por ejemplo, el de la electricid­ad para la producción de H verde).

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain