París declara la alerta máxima por la Covid-19 y anuncia más restricciones
Desde esta mañana, París y varias ciudades de su periferia han entrado en estado de alerta máxima por la preocupante expansión del coronavirus, lo que comportará nuevos cierres de locales y medidas más estrictas en actos y establecimientos públicos que comenzarán a aplicarse a partir de este martes por un periodo de 15 días. Así se lo comunicó el primer ministro galo, Jean Castex, a la alcadesa parisina, Anne Hidalgo, al constatar la falta de progresos de la capital francesa en la reducción de los baremos que establecen la gravedad de la pandemia, así como la elevada presión en los hospitales de la región.
Se esperaba que, a consecuencia de esta nueva alerta, ayer mismo se confirmara el cierre inmediato de los bares en la capital, pero fuentes del Ejecutivo citadas en la prensa gala aseguraron que podrán permanecer abiertos con un protocolo sanitario reforzado. Los restaurantes, por el contrario, podrán permanecer abiertos, una medida pactada con el sector y que será de aplicación a las otras zonas, como Marsella, donde permanece activa la alerta máxima desde hace una semana.
Asimismo, se mantendrá “más que nunca” la recomendación de priorizar el teletrabajo, y se establecerán nuevas disposiciones para luchar contra la propagación del virus en los centros de enseñanza, lo que implicará reducir a la mitad el número de estudiantes por clase en universidades e institutos.
Las ciudades francesas pasan a alerta máxima cuando superan tres baremos establecidos por el Gobierno: una tasa de incidencia superior a los 250 positivos por cada 100.000 habitantes entre la población en general. Un nivel superior a los 100 casos entre las personas mayores. Y por último un porcentaje superior al 30% de las camas de las ucis ocupadas por pacientes de COVID-19. Tres variables que París viene rebasando desde el pasado jueves, cuando se contabilizaron 263 y 105 casos respectivamente y una tasa de ocupación que ronda el 35 % en las unidades de cuidados intensivos. “Las cifras están ahí, y pesan mucho”, comentó este domingo Aurélien Rousseau, director general del ARS (Oficina regional de sanidad) de Île-de-france.
Ayer se detectaron en Francia 12.565 nuevos casos de coronavirus y 32 muertes, mientras 893 afectados por la Covid-19 han ingresado en la UCI durante la última semana.
La capital supera desde el jueves los baremos marcados para endurecer las medidas anticoronavirus