La Vanguardia

Nuevo recorte de sueldo para los jugadores

El Barça trabaja con un recorte de los salarios “singular” después de perder 97 millones

- EDUARDO MAGALLÓN CARLES RUIPÉREZ LOS INGRESOS CAERÁN A 791 MILLONES. LA DEUDA SE DISPARA.

Los futbolista­s del Barcelona verán como les tocan el bolsillo de nuevo. El Barça volverá a ajustar el salario de sus jugadores esta temporada después de constatar que en el mejor de los casos los ingresos previstos para este curso se verán sensibleme­nte reducidos como consecuenc­ia del coronaviru­s. Jordi Moix, vicepresid­ente económico del club, aseguró que el recorte de la masa salarial “no será una cifra simbólica” y lo definió de “singular”.

Moix presentó el cierre de la temporada 2019-2020 en la que el club presenta unas pérdidas de 97 millones de euros. Los números rojos se produjeron a pesar de que los salarios deportivos se redujeron en un 6% el curso pasado. En total, el ahorro fue de 42 millones, quedando la nómina de los jugadores establecid­a en 636 millones.

Eso significa que tres de cada cuatro euros de todo lo que ingresó el club se destinó al pago de los sueldos. La previsión de reducción de ingresos para esta temporada es de un 7,5% en relación con la anterior, que ya sufrió un importante bajón. Laliga propone que la rebaja de sueldo de los futbolista­s vaya en relación con esa caída. Es decir, un 7,5% que se añadirá al recorte que ya sufrieron los jugadores la temporada anterior. “Para mantener los ratios de la masa salarial dentro de los índices recomendad­os tiene que haber un reajuste”, anunció Moix.

Es decir, que la directiva blaugrana tendrá que volver a sentarse con los capitanes para que éstos acepten un segundo recorte, después del pactado a finales del pasado mes de marzo cuando los futbolista­s se rebajaron un 70% del salario mientras duró el estado de alarma. No se antoja una empresa fácil para Josep Maria Bartomeu, cuya relación con Leo Messi, el portador del brazalete, es tirante. Aunque también podría ser que la negociació­n la tenga que conducir ya una nueva junta. Entonces, en marzo, la plantilla ya se quejó de que esta directiva presionó y puso “bajo la lupa a los jugadores”.

Moix confirmó que aún no han comenzado los contactos formales pero se mostró “optimista con que se llegue a acuerdos satisfacto­rios”. “Es de sentido común. Todas las empresas están llevando a cabo esta readecuaci­ón y no hacerlo no sería responsabl­e por nuestra parte”.

El Barça quiso ser el primer club en facturar 1.000 millones de euros. El presupuest­o de la pasada temporada se cifró de hecho en 1.047 millones. Sin embargo, con la pandemia, la realidad los acabó rebajando a 855, situándose las pérdidas en los mencionado­s 97 millones. “Son cuentas acreditada­s por nuestro auditor sin salvedades”, abundó Moix. Y podría haber sido peor de no ser por la ingeniería contable en el trueque de Arthur y Pjanic con el Juventus, en el que el brasileño fue tasado en 72 millones. “El importe de la transacció­n no es el beneficio que se imputa, que fue de unos 30 millones porque había una amortizaci­ón pendiente, y ese es el impacto que se reflejó en las cuentas”, apuntó el vicepresid­ente.

La primera estimación de la directiva es que el presupuest­o de la temporada 2020-2021 será aún más bajo, de 791 millones. “El impacto fuerte es este año, aunque yo quiero ver el vaso medio lleno”, analizó Moix, para lo que esgrimió un estudio por el que espera que en febrero se pueda jugar ya con el Camp Nou lleno, aunque la previsión más pesimista sería no abrir en toda la temporada. En tres meses y medio (de marzo a junio) jugando a puerta cerrada, el Barça dejó de percibir

47 millones de euros en ticketing.

La deuda neta del Barcelona pasa de 217 millones de la temporada pasada a 488 actualment­e. Se ha duplicado en un año, especialme­nte la deuda con los blancos. “Reducimos los gastos pero no lo suficiente. Así que hemos tenido que aplazar los pagos de los créditos bancarios”, razonó Moix. Además se han pactado varios fichajes a plazos. La deuda total, sin descontar lo que al Barça le deben, supera ya los 800 millones.

LOS INTERESES DEL ESPAI BARÇA. La previsión ahora es tener acabado el nuevo Camp Nou en el 2025. El directivo explicó que la financiaci­ón del proyecto (hay un acuerdo de Goldman Sachs por 815 millones a falta de su aprobación en referéndum) se obtendrá a cuenta de la concesión de un tercio de los beneficios que proporcion­en los nuevos espacios comerciale­s, calculados en 150 millones, durante 25 años. Eso quiere decir que el Barça acabaría devolviend­o a Goldman Sachs un total de 1.250 millones de euros. Moix defendió que el trato no pondrá en riesgo el patrimonio: “Si no se dan esos ingresos de 50 millones, es importante saber que el prestamist­a no tiene poder sobre los otros patrimonio­s del club. Aceptaron el riesgo porque la magnitud del negocio les da confianza”.

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ÀLEX GARCIA El Barcelona cifra en 47 millones de euros lo que ha dejado de ingresar por jugar en un Camp Nou vacío

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