La Junta, del PP, cierra León y Palencia con las restricciones de Madrid
En León, con 124.000 habitantes, y Palencia, con algo más de 78.000, se aplican –desde la medianoche hoy y durante los próximos 14 días– las mismas medidas de restricción de la movilidad que ya existen en Madrid, puesto que ambas cumplen los criterios marcados por el Ministerio de Sanidad de incidencia, contagios y ucis. Así lo anunció ayer la consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado.
Palencia lleva dos semanas con restricciones para las reuniones sociales, en los aforos de la hostelería y actos culturales, que no han doblegado la curva de contagios ni la incidencia. Esta ciudad llegó ayer a los 536,71 casos por 100.000 habitantes en 14 días, lo que ha llevado a la decisión de aplicar un mayor control sobre la movilidad, explicó Casado. León, cuyos datos ya preocupaban la semana pasada, presenta una incidencia de 510,45 casos por 100.000 habitantes.
El alcalde de esta ciudad, José Antonio Díez, hizo ayer un llamamiento a la “responsabilidad y precaución” de todos los ciudadanos para salir cuanto antes de las medidas restrictivas. Al mismo tiempo, alertó de que se ha producido un incremento de la presión asistencial que es –a día de hoy– el dato más preocupante en Castilla y León.
“No se ha incrementado el número de camas hospitalarias ni se han reabierto los consultorios, ni dotado las ucis necesarias, por lo que la ocupación de las habilitadas está ya por encima de las ratios establecidas por las autoridades sanitarias”, explicó Díez.
Por su parte, el alcalde de Palencia, Mario Simón, pidió ayer a los palentinos “tranquilidad y responsabilidad”, y admitió que las medidas son ineludibles porque “la realidad se impone y los números a día de hoy hacen que sean necesarias, unas medidas que nos limitan y nos condicionan, pero que son necesarias porque excedemos todos los parámetros”, dijo.
Mientras, en Aragón, la dirección general de Salud Pública va a emitir una orden para que Zaragoza y Huesca pasen a la fase 2, desde el próximo 8 de octubre y hasta el 15 del mismo mes, como medida preventiva ante la posible celebración de reuniones sociales en los días festivos que rodean al 12 de octubre, día del Pilar.
En este sentido, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha pedido a los ciudadanos que se conciencien de que este año no se pueden celebrar como en años anteriores.
“Nos apena que no haya fiestas, pero es necesario para la salud de las personas y para la economía de la ciudad. Entre todos tenemos que evitar unas no fiestas como ha pasado en otras localidades, si no se tendrán que tomar medidas más estrictas”, ha dicho.
Según ha avanzado el Gobierno de esta comunidad, esta decisión se enmarca en el principio de prudencia, dado que los datos epidemiológicos de la capital aragonesa reflejan una incidencia de entre 200 y 300 casos por 100.000 habitantes, estable en las últimas semanas.
Con esta orden se pretende preservar el sistema sanitario y prevenir un futuro confinamiento de la ciudad en semanas posteriores.
Así, Zaragoza pasará a fase 2, con la salvedad de que se permitirá mantener el 75% en los espectáculos y actividades culturales que cuenten con butacas preasignadas.
Por su parte, y ante el incremento de los positivos en las últimas semanas, Huesca pasará también a fase 2, sin confinamiento perimetral, durante una semana, al alcanzar una tasa de 700 casos por 100.000 habitantes.
Zaragoza y Huesca pasan a la fase 2 durante una semana, como medida preventiva ante las fiestas del Pilar