El mal perder de James
El escolta se marchó de la pista a 10 segundos del final ante una derrota segura
Lebron James (35 años) es la principal figura de la burbuja que la NBA ha montado en Disney. Líder indiscutible de su generación y personaje comprometido con la sociedad, no se corta a la hora de hacer campaña por los demócratas desde hace años, su ascendencia ha ido creciendo hasta convertirse en uno de los personajes más respetados del deporte estadounidense. Esta reputación no se ha fraguado en una tarde, sino a lo largo de una prolífica carrera. De hecho, sus juveniles actitudes arrogantes le granjearon mala fama en sus comienzos en la NBA. Pero los años, también las victorias, desinflamaron su carácter efervescente para hacerlo más correcto frente a los rivales en la derrota. Hasta el pasado domingo, cuando James dejó de ser por un rato el mejor representante de la NBA y abandonó la pista diez segundos antes del final sin saludar a sus rivales al verse perdido en el tercer partido de las finales contra Miami Heat. Los Lakers cayeron con justicia (115-104) y con ello Miami recortó distancias (2-1).
Lebron James ha llegado con la presente a diez finales, pero solo ha ganado tres. Quizás por eso no fue capaz de gestionar su frustración al ver como ese tercer encuentro se le escapaba frente a un rival, además, que por segundo partido consecutivo no podía contar con dos de sus mejores jugadores: Bam Adebayo y Goran Dragic.
Su actuación fue decepcionante tanto para él como para su equipo. Sumó 25 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias, pero perdió ocho balones, alguno de ellos decisivo. Tampoco tuvo su noche Anthony Davis (15 puntos), que después de perder cuatro balones en el primer cuarto y cargarse con tres faltas, se eximió de responsabilidad en el último parcial. Fueron los secundarios Kuzma y Morris, con 19 puntos cada uno, los que devolvieron a los Lakers al partido en el último cuarto después de ir por debajo en el electrónico durante buena parte del encuentro. Ese era el momento en que se esperaba al mejor James. De hecho había aparecido con acierto en los dos primeros partidos de la serie. Sin embargo, en esta ocasión se encontró con un rival intratable, que pareció disfrazarse de Michael Jordan para hacer un poco más horrible su noche y la de los angelinos. El partido de Jimmy Butler estuvo fuera de lo normal. Consiguió un triple doble con 40 puntos, algo que en unas finales solo lo habían logrado Jerry West en 1969 y el propio James en el 2015. El escolta es un tipo inteligente, que con los años ha aprendido a ejercer un liderazgo positivo para su equipo. No es egoísta en el tiro, de ahí que Miami llegase a disputar el título con cuatro jugadores con dobles dígitos de forma habitual. Pero ante un partido tan decisivo, Butler decidió que debía ganar saltándose sus propias normas. Para ello ejerció un dominio absoluto en la pista tanto en ataque como en defensa y anuló completamente a Lebron James. Algo tan excepcional que recordó a Michael Jordan en sus últimos anillos con Chicago, cuando todo lo que pasaba en la pista parecía decidido únicamente por él. “Es uno de los mejores competidores que tenemos en nuestro juego. Poder pelear ante un competidor tan feroz es algo que sin duda recordaré cuando deje de jugar”, admitió James después del partido.
Mientras tanto, el de Akron se desesperaba. En el último cuarto le pitaron pasos en dos penetraciones y varias faltas tanto en ataque como en defensa. Algo muy poco habitual en una estrella de su calibre. Su enfado fue creciendo contra los árbitros y contra sus compañeros. Mientras tanto, veía como su rival, al que consideraba inferior por sus importantes bajas, iba a sumar su primer triunfo y aumentaba las dudas sobre su equipo. Poco después de que Robinson anotase el triple definitivo, Lebron se marchó al vestuario. No había comparecido en su cara a cara con Butler. Y no quiso esperar al final. “Me fui por todo”, dijo después intentado excusarse. “Sabemos que podemos jugar mucho mejor y el martes tenemos otra oportunidad”, finalizó.
NÚMEROS HISTÓRICOS
Jimmy Butler (Miami) desquició a Lebron James con sus 40 puntos, 11 rebotes y 13 asistencias en una actuación para el recuerdo