Sitges escenifica el ‘funeral’ de la hostelería
Unas 900 personas protestan por las nuevas restricciones sanitarias y anuncian nuevas movilizaciones conjuntas
Cerca de 900 personas vestidas de duelo, e incluso con coronas florales, se manifestaron ayer al mediodía en Sitges. La concentración, convocada bajo el lema de “Ven al funeral de la hostelería”, sirvió para protestar por las nuevas restricciones de la Generalitat ante la evolución de la pandemia. La acción, que coincidió con la clausura del Festival de Cinema Fantàstic, contó con el apoyo entidades de la restauración, la hostelería y el ocio nocturno de toda Catalunya.
Los concentrados, junto al monumento del Greco, lucieron pancartas en las que se podía leer: “Ocio en quiebra”. Incluso se dispusieron diversas mesas de restaurante en el paseo de la Ribera. Estas mesas vacías quisieron ser “el símbolo de la muerte del sector”, según Alejandro Eguía, el gerente del Gremi d’hostaleria de Sitges. Eguía ve que el sector “está pesimista y muy cabreado”. Afirma que mientras les obligan a cerrar tienen que asistir a la práctica del botellón en espacios públicos.
Desde el Gremi d’hosteleria se asegura que “se producirán pérdidas irreparables para el sector, que ya se encuentra muy tocado”, y se añade que habrá consecuencias también para otros sectores ligados a la restauración, como el agroalimentario. Creen que las últimas medidas pueden poner a las puertas del cierre al 25% de los establecimientos.
Los restauradores locales califican de “injustificado y excesivo” el cierre. Exigen la apertura “como en la mayoría de Europa”, ayudas urgentes “desde todos los niveles” y un plan de rescate a 4 años. Damià Orts, presidente de la Associació de Bars Musicals del Carrer del Pecat, solo ve posible revertir la “complicada” situación con más movilizaciones conjuntas.