Las obras de la Modelo quedan relegadas al 2023
La cárcel se convertirá en un polo de equipamientos con vivienda y rodeado de verde, a partir de los edificios existentes
La Modelo será un nuevo polo de equipamientos del Eixample, rodeado de verde, y también albergará vivienda pública. Una nueva vida a partir de la estructura de la vieja cárcel cuyas obras no comenzarán hasta el 2023, porque el objetivo del gobierno municipal para este mandato es tener solo redactado los proyectos ejecutivos. Así lo afirmó ayer la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, que negó hasta en dos ocasiones a los periodistas que el proyecto esté sufriendo algún retraso, aunque estos sean ya crónicos. Sin ir más lejos, el calendario con el que trabajaba el gobierno de la alcaldesa Ada Colau en el anterior mandato fijó primero (mayo del 2018) que empezarían obras este año para después aplazarlas (mayo del 2019) hasta el 2021.
“El objetivo siempre ha sido tener los proyectos ejecutivos redactados a final de este mandato”, insistió vehemente la teniente de alcalde de Urbanismo en rueda de prensa. “En ningún caso ha habido un atraso de la propuesta de transformación de la Modelo”, insistió Sanz que señaló que el único retraso que se ha producido en este proyecto ha sido el anuncio de la propuesta ganadora, prevista para marzo, y aplazada por la pandemia (de hecho estaba prevista para enero).
En este sentido, la edil, obviando la hemeroteca y las promesas, explicó que durante el año que viene el equipo redactor elaborará el proyecto de ordenación del conjunto y el de los espacios libres (costará unos 360.000 euros) para que el Ayuntamiento redacte los proyectos ejecutivos al año siguiente. Y, así, si todo va bien, comenzar obras en el próximo mandato, en el 2023.
Sanz dio este nuevo calendario en la presentación del proyecto ganador del concurso público para la transformación de la Modelo, que han conseguido Forgas Arquitectes y Planas Esquius Segatti con su propuesta Model, batega! a la que ahora se le tendrá que dar forma.
El proyecto destina un total de 14.150 metros cuadrados a vivienda pública–140 pisos– y otros 14.510 metros cuadrados a un parque público urbano. La vieja prisión también incorporará siete equipamientos públicos y espacios que darán servicio al barrio y a la ciudad. Habrá un instituto-escuela, una guardería, un equipamiento residencial, un pabellón polideportivo, un espacio para jóvenes, espacios para economía social y solidaria y un espacio memorial. Los equipamientos y espacios de uso compartido ocuparán 24.131 metros cuadrados.“la idea es que los equipamientos ocupen las plantas bajas y que las viviendas estén en la parte superior de las galerías”, explicó el arquitecto municipal, Xavier Matilla, que destacó la conectividad con el entorno: la propuesta topográfica permite integrar los edificios con el parque y dar continuidad en el ámbito de las calles de Rosselló y Provença.
Llevar a cabo la transformación de la Modelo supondrá, según apuntó Janet Sanz, alrededor de 50 millones de euros. Se buscará la colaboración de otras administraciones.
La teniente de alcalde abrió la puerta a que el proyecto se pueda ejecutar por fases, es decir, que por ejemplo el parque pueda abrirse antes de que se hayan acabado todos los equipamientos, para que los vecinos puedan comenzar a disfrutar de una vez de él, aunque asegurase que el proyecto no acumula ningún retraso.
Sanz negó el retraso del proyecto que se tenía previsto ejecutar este año o como muy tarde el que viene