Steve Bannon y Trump
“Perturbador”, “polémico” y “aterrador” son tres de las referencias más directas que he leído sobre el documental Steve Bannon. El ideólogo de Trump, que estos días puede verse en Movistar +. Con el titulo original de American dharma, este documental de 95 minutos dirigido por Errol Morris en el 2018 nos adentra en la polémica vida de Steve Bannon, el consejero de Trump durante su campaña en las elecciones estadounidenses del 2016 y estratega jefe de la Casa Blanca durante los primeros siete meses de la Administración del polémico presidente.
Morris fue quien dirigió el aclamado documental The fog of war, basado en una entrevista con Robert S. Mcnamara, el secretario de defensa de John Kennedy y Lyndon Johnson. The fog of war, una visión pacifista del hombre que diseñó desde Harvard la frecuencia de las oleadas de bombardeos en la Alemania nazi y en el Japón imperial, ganó el Oscar al mejor documental en el 2003 en competición con el magnífico trabajo Balseros, de Carles Bosch.
Bannon, la estrella del nuevo documental de Morris, está actualmente pendiente de juicio acusado de un fraude vinculado con el polémico muro en la frontera con México. Se le acusa de utilizar parte del dinero para cubrir gastos personales. Quedó en libertad provisional en agosto pasado tras el pago de cinco millones de dólares en fianza, de los que 1,5 fueron depositados en metálico.
A pocos días de las elecciones en Estados Unidos, el documental sobre Bannon ofrece una clara visión sobre lo que representa el populismo, y adentra a los espectadores en la caverna de la conspiración antidemocrática que se cierne sobre aquel país. Si quiere saber lo que representa Trump, no duden en ver este documental del que también se ofrecen extractos en Youtube.
Bannon, impulsor de la publicación digital de extrema derecha Breitbart News, habla de una nueva revolución en la que adquiere gran protagonismo el votante de clase baja, racista, amante de las armas y convencido de que deben ser ellos los que controlen el país política y militarmente. Bannon ahonda claramente en la teoría de que lo mejor que le puede pasar a su América blanca es la ruptura, la crisis, el cataclismo y que Trump es la persona idónea para llevar adelante ese reto.
A pocos días del 3 de noviembre, fecha en la que los norteamericanos concurrirán a las elecciones, Joe Biden aparece como el candidato más valorado, 10 puntos por delante de su adversario, según una media de encuestas de hace una semana. La valoración de Biden se sustenta en la idea generalizada de que Trump ha roto América. Se cierne sobre Trump, el presidente de rostro anaranjado y cabello rubio, la acusación generalizada de que ha violado muchas de las reglas políticas de Washington, de que no ha pagado sus impuestos, de que ha dividido el país y de que su política ha favorecido que la Covid-19 haya causado estragos.
Es ciertamente aterrador que, a pocos días de los comicios, Bannon haya declarado que si Biden gana, el mundo no se desprenderá de Trump. Bannon ha declarado que, si pierde las elecciones, el actual presidente volverá a presentarse en el 2024. Bannon debe confiar, de hecho, confía, en que la revolución está en marcha y que nadie les detendrá. Así es el populismo, pese a no tener la razón, ni la ley de su parte, sigue esgrimiendo su verdad como su dharma, su sustento, su verdad absoluta.