Dos mil euros, una burla

En un Estado socialdemócrata y de derecho resulta indigno, inmoral y ruin jugar con la necesidad de las personas.

El gesto de ofrecer dos mil euros a autónomos y pymes que languidecen ha resultado ser un anunciado fracaso, y de gran desconsideración, por convocarlos a una carrera a la desesperada por una inasequible limosna. Ustedes eran conscientes de que se colapsaría el sistema y sabían que se agotarían dichos recursos dejando fuera injustificadamente a muchos otros necesitados.

Señores del Gobierno, que han hecho sentir a miles de personas cual burro a por la zanahoria que nunca llega, dejen de burlarse de quienes pagan sus sueldos. Cesen en la venta de falsas expectativas que provocan maltrato psicológico a quienes convocaron. Hagan un ejercicio de empatía y responsabilidad, y si no son capaces, les pedimos reflexión, porque entonces no son dignos de su cargo ni del sueldo que perciben con o sin Covid-19.

Emma Blanco Gelida