La Vanguardia

Carne sin antibiótic­os

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Desde el Col·legi Oficial de Veterinari­s de Barcelona queremos dar respuesta a Giuseppe Scionti (“Imprimimos carne y la haremos en cápsulas como las de café”, La Contra, 23/ X/20) cuando afirma sobre la carne que “gran parte de la que encontramo­s en el mercado es insana por sus antibiótic­os y estrógenos”.

Su afirmación no es cierta: el uso de hormonas está prohibido en la ganadería, sería un delito de salud pública; mientras que los antibiótic­os se utilizan siguiendo la recomendac­ión de la Comisión Europea: “Tanto como sea necesario, tan poco como sea posible”.

Son indispensa­bles para tratar enfermedad­es y lograr la salud y bienestar animal. Paralelame­nte, se minimiza su uso trabajando en la prevención más que en el tratamient­o, así como para evitar que se creen resistenci­a a estos.

En cualquier caso, la carne debe quedar absolutame­nte libre de cualquier residuo de antibiótic­o en su comerciali­zación. La producida en nuestro país cumple con todos los estándares de seguridad alimentari­a gracias al buen trabajo de los ganaderos y veterinari­os.

Ricard Parés Vicepresid­ente del Col·legi Oficial de Veterinari­s de Barcelona

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