“Hay que cambiar de óptica, ni todo es tan bueno ni tan malo”
Adrià Salas. cantante de La Pegatina, que publican su nuevo álbum ‘Darle la vuelta’
Es una de las formaciones nacionales con mayor proyección en el extranjero y, también, con un sobresaliente seguimiento a nivel de ventas y de directos.tras la macrobanda catalana La Pegatina hay trabajo, una adictiva mezcla a base de rumba, pop y ska, y un directo que contagia diversión y buen rollo. Con la pandemia alterando giras y conciertos, el grupo acaba de publicar Darle la vuelta (Warner), nueva entrega grabada a distancia y a trozos por el productor Tato Latorre sobre una decena de composiciones escritas por el vocalista del grupo Adrià Salas.
¿Cuándo les veremos en directo?
Todo ha cambiado. El disco ha salido más o menos com estaba previsto, pero la gira europea de este verano, los conciertos de presentación en España y el tour latinoamericano para ahora... En principio esperamos comenzar los directos en marzo; de hecho nuestros ahorros se acaban en febrero. Confiemos.
Lo más llamativo es que hayan contado con Tato Latorre (Efecto Pasillo, Maldita Nerea) como nuevo productor. ¿Por qué?
En nuestro disco anterior de estudio, Ahora o nunca, optamos por el productor argentino Rafa Arcaute, que había trabajado con Andrés Calamaro y muchos más, para dar un tinte más latinoamericano a nuestra propuesta porque nos interesaba mucho tirar para allá. Para nosotros el disco que salió fue el que más se alejaba de todo lo que habíamos hecho hasta entonces y había canciones que cuando salían compuestas eran originalmente rumbas-ska pero que luego al grabarse no tenían nada de eso y eran bastante de experimento. Canciones que hubiéramos hecho de otra manera, pero decidimos dar un voto de confianza. Nuestros grandes objetivos desde que entramos en Warner han sido sobre todo nuestra presencia en la radio y llegar al público latinoamericano. Tanto entonces como ahora vemos que estos son los caminos para que La Pegatina dure muchos años y nos sigamos planteando siempre nuevos retos.
¿Y después de esa experiencia?
Ahora, con este Darle la vuelta hemos querido volver un poco a nuestra línea previa al disco anterior, la línea de álbumes como Eureka!
o Revulsiu. Con Latorre, que ya nos produjo un par o tres de canciones en nuestro último disco recopilatorio, compartimos un lenguaje musical común, sabe lo que es la rumba, lo que es mezclar músicas folclóricas con el pop, pero lo que sí le pedimos fue que el sonido final fuera más norteamericano. Y en ese aspecto hemos contado además con todo un
crack como Rafa Sardina en las mezclas. Estoy muy contento porque el productor ha captado y reflejado muy bien mi imaginario.
La mayoría de temas se compusieron antes del coronavirus.
Yo no paro de escribir. Voy haciendo y cuando llega el momento de pensar en un disco, miro lo que he hecho. Y en este caso había escrito unos cuarenta temas en poco más de un año. Luego los nueve del grupo elegimos los mejores del 0 al 10, sumábamos y pasamos los elegidos al Tato. Y fue una selección independientemente de estilo, lengua y autor, porque en la banda hay otros que componen . Y en esa selección final todas las canciones estaban escritas por mí y todas en castellano. Y antes de que nos pusiéramos a grabar decidí componer una en catalán que pudiera incluirse en ese top ten .Y así fue cuando ya en pandemia compuse La guspira, que además habla de eso, de los efectos de la pandemia.
Es el álbum mas arriesgado en algún sentido.
Este disco es confort porque es cómodo. Pero es algo arriesgado porque se ha hecho de una manera muy diferente a como solemos. El productor iba diciendo a cada uno confinado en casa lo que tenía que tocar y cómo tenía que sonar, luego él pulía, cortaba y enganchaba y nos lo enviaba, y la verdad es que flipamos mucho.
¿Hay compromiso?
Hay varias canciones como Lena, sobre el maltrato femenino en una pareja , o Siempre te pedí, que echa una visión sana sobre el hecho de la ruptura... en estos momentos creo que la critica va por allí.
El mensaje del álbum sería...
Vamos a dar la vuelta a las cosas, vamos a cambiar la óptica, ni todo es tan bueno, ni para siempre.