Las nuevas restricciones dejan Moscú sin los grandes fastos de Año Nuevo
Las medidas puestas en práctica en Rusia para parar la segunda oleada de la Covid-19 no han dado resultado. Serguéi Sobianin, alcalde de Moscú, epicentro de la epidemia en Rusia, ha reconocido que la situación “está empeorando”. Las autoridades rusas quieren evitar a toda costa el confinamiento de la población. En su lugar están obligados a aplicar normas cada vez más restrictivas. Desde hoy y hasta el 15 de enero Moscú cierra bares, restaurantes y todo lugar de ocio, como boleras, discotecas o karaokes, entre las 23 y las 6 horas, lo que suspende de hecho los grandes festejos de Año Nuevo.
Quedarse sin el Año Nuevo es para los rusos como quedarse sin Navidad en los países occidentales. El 31 de diciembre es la fiesta popular más arraigada, que se celebra sobre todo fuera de casa, con conciertos en las plazas públicas, cenas en los restaurantes y discotecas. La Iglesia ortodoxa, la confesión mayoritaria en el país, sigue el calendario juliano y celebra la Navidad el 7 de enero.
“El Año Nuevo no desaparece, llegará según lo previsto el 31 de diciembre. Pero, lamentablemente, en un formato más modesto”, dijo Alexéi Nemeriuk, responsable de Comercio y Servicios en el Ayuntamiento
de Moscú. Sobianin ha recomendado a los moscovitas que reciban el 2021 en familia. Aunque las medidas para contener la expansión de la pandemia corresponden a cada región, el ministro de Sanidad, Mijaíl Murashko, ha dado el mismo consejo a todos los rusos.
El principal motivo de preocupación es que las medidas tomadas hasta ahora han sido insuficientes. “Lamentablemente, en las próximas semanas podemos esperar un deterioro mayor de la situación”, ha dicho el alcalde capitalino.
Desde que comenzó la segunda oleada, el pasado septiembre, las autoridades han dejado de ser complacientes con el uso de mascarilla en zonas comunes y el transporte público. A jubilados y enfermos crónicos se les ha recomendado no salir de casa. Desde comienzos de octubre los estudiantes de centros públicos de secundaria y universitarios siguen clases no presenciales y las empresas de Moscú tienen orden de enviar a casa a un tercio de sus plantillas.
Esta semana se han registrado más de 20.000 contagios diarios en todo el país. Ayer se batió, además, el récord de muertes en un solo día, con 439, de ellas 71 en la capital. Con 1,85 millones de contagiados por coronavirus, Rusia es el quinto país del mundo, por detrás de Estados Unidos, India, Brasil y Francia, y por delante de España.