El juez da la razón a Rosell en el supuesto espionaje a Roures
La Audiencia de Barcelona archivó ayer la denuncia por espionaje de Jaume Roures contra Sandro Rosell. Esta decisión, de carácter irrevocable, estima así el recurso de apelación interpuesto por la defensa del expresidente del Barcelona al considerar que no existen indicios suficientes que avalen la tesis de Roures y Mediapro según la cual dicho espionaje fue inducido o instigado por Sandro Rosell, con la cobertura del FC Barcelona.
Con este veredicto, la Audiencia también ha ratificado el archivo para el FC Barcelona, decisión de la instructora del juzgado número 8 que había sido recurrida por parte de Roures y Mediapro.
Tras conocer la decisión, Pau Molins, abogado de Rosell, apuntó que la resolución “ha evitado que Rosell se viera de nuevo sometido a un juicio penal por acusaciones sin fundamento”. Mediapro denunció en el 2016 a Rosell por espionaje empresarial “sistemático, deliberado y organizado” producido entre el 2009 y el 2011, al haber tenido acceso al correo electrónico de Roures. La querella criminal se amplió a Joan Carles Raventós, director general de secciones del FC Barcelona, Robert Cama, exresponsable del departamento informático de Mediapro, y contra el FC Barcelona, Bonus Sport Marketing, la empresa de la que era propietario Sandro Rosell, y Socktel Servicios Informáticos.
En enero, el juzgado de instrucción número 8 de Barcelona ya
LA REACCIÓN
El presidente de Mediapro se muestra contrario a la sentencia pero la asume
acordó el sobreseimiento provisional de la causa respecto del FC Barcelona, en la querella interpuesta por Roures y Mediapro contra el club, al que imputaba su participación en un delito continuado contra la intimidad personal, un delito continuado de revelación de secreto empresarial y un delito continuado de hurto agravado.
Por la tarde, Roures difundió un comunicado con su opinión tras la sentencia. “Respeto aunque no comparto el criterio de la Audiencia Provincial pero reitero mi convencimiento de que Sandro Rosell era el instigador”. El presidente de Mediapro añadió: “Sigo pensando, y así lo seguiré manifestando, que Sandro Rosell es el responsable del espionaje al que fui sometido durante, al menos 3 años, y que por tanto, no solo no rectificaré mis declaraciones sino que me reafirmo en ellas”.