Clamor del empresariado catalán para que el Govern les deje trabajar
Pimec amaga con acudir a los tribunales para reclamar indemnizaciones
Más de 40 asociaciones empresariales de los sectores afectados por las restricciones se congregaron ayer en Barcelona en un acto organizado por la patronal Pimec para reclamar al Govern un cambio de rumbo en el control de la pandemia que permita mantener una mayor actividad económica a la vez que se protege la salud pública.
El clamor de los sectores del turismo, el comercio, la restauración o la cultura fue unánime. Uno detrás de otro, los asistentes pidieron a las administraciones catalana y central que les dejen de “dar limosna” y les permitan trabajar siguiendo unas condiciones de seguridad sanitaria. El presidente de Pimec, Josep González, advirtió que un 30% de negocios catalanes se plantea cerrar definitivamente el año que viene si no recibe apoyo, lo que puede dejar un panorama económico desolador. “Hacemos un llamamiento a las administraciones para buscar soluciones y no cerrar empresas y perder puestos de trabajo”, insistió el secretario general de la patronal, Antoni Cañete.
Pimec presentó un manifiesto al que ya se han adherido más de 220 agrupaciones empresariales catalanas en el que proponen la creación de mesas sectoriales para abordar la viabilidad de los negocios en riesgo de quiebra por las restricciones. Además, reclaman que el Departament d’empresa y el de Treball se incorporen a las reuniones del Procicat, el organismo formado por Salut e Interior que toma las decisiones en cuanto a la gestión de la crisis del coronavirus. Los empresarios no entienden que, dadas las consecuencias económicas de la pandemia, estas conselleries no estén representadas con mayor peso en la toma de decisiones. Los pequeños empresarios y los autónomos también volvieron a pedir medidas económicas “inmediatas y generosas” a nivel fiscal y financiero, como la exención de impuestos y ayudas directas más cuantiosas que las aprobadas hasta el momento, así como el uso masivo de tests rápidos de antígenos “para hacer compatible la continuidad de la economía con la protección de la salud”. El sistema de rastreo de contactos de la Covid-19 debería asimismo mejorar, añadieron en el manifiesto.
“La paciencia de las empresas está al límite y esto crea cansancio”, señaló González desde las instalaciones deportivas David Lloyd Club Turó, donde se celebró el acto. La entidad redobló su presión a la Generalitat para que ayude a las pymes y los autónomos y presentó las conclusiones de un informe jurídico elaborado por Joan Manuel Trayter, catedrático de Derecho Administrativo de la Universitat de Girona, sobre “la posible responsabilidad patrimonial” de la administración por las medidas adoptadas por la crisis sanitaria.
“Nuestra intención no es iniciar un proceso judicial contra la administración pero sí tener herramientas para reclamar medidas justas para la actividad empresarial. Evitemos la pandemia económica”, insistió González.
Pimec ha solicitado este informe jurídico a petición de sus asociados para “apremiar” a la administración a “acelerar medidas compensatorias
Las pymes proponen crear mesas sectoriales para ayudar a los afectados por las restricciones
a las empresas que están a punto de quebrar” a causa de las restricciones. Trayter explicó al respecto que los gobiernos tendrían que indemnizar a las empresas si las medidas decretadas para contener la pandemia causan un daño patrimonial claro y evaluable. Según el catedrático, las últimas medidas adoptadas –estado de alarma, toque de queda, cierre de negocios...– no responden a un motivo de fuerza mayor, sino que se deben a la gestión que los gobiernos están realizando. “Los daños económicos no se están produciendo por la pandemia, sino por las decisiones que la administración toma”, aseguró.
“Ánimo”, dijo el presidente de Pimec al finalizar el acto, y “el que crea” que tiene que acudir a los tribunales para reclamar una indemnización “adelante”.