Presos de Can Brians elaboran un vino solidario
Iniciativa de la bodega Raventós i Blanc para facilitar la reinserción social y laboral a partir de la producción de un moscatel ecológico
Una visita “muy conmovedora e inspiradora” a la prisión de Can Brians 2 ha llevado al vitivinicultor Pepe Raventós, director general de la bodega Raventós i Blanc, a impulsar un vino blanco que quiere facilitar la inserción social y laboral de sus presidiarios. Lo ha hecho con la colaboración de la Fundación Ared y de la dirección general de Presons de la Generalitat. Se ha vendimiado y elaborado con la participación de presos de Can Brians 2, donde hay una masía abandonada, la casa solariega de Can Margarit, con una bodega que se querría recuperar. El vino, un moscatel ecológico de mínima intervención de la DO Penedès que se vende a 9 euros, se ha bautizado como Ciutat Nua. En las etiquetas están las huellas de algunos internos, acompañadas de frases suyas que hacen referencia al arrepentimiento, la aflicción, la añoranza y la esperanza.
El beneficio se repartirá entre la Fundación Ared (60%) y la prisión Can Brians 2. Destinarán el dinero a la reinserción de las mujeres de la prisión de Wad-ras (Ared), y al mantenimiento de los edificios y las obras de rehabilitación de Can Brians 2.
Según Raventós, con este vino presentado ayer se quiere “hacer partícipes a los residentes de Can
Brians, y conseguir transmitir nuestra pasión hacia la viticultura y la enología con el objetivo de facilitar su inserción social y laboral, a través del trabajo activo y dinámico”. Una de las próximas iniciativas es formar a un grupo de presos en el mundo de la hostelería. También han colaborado Obal Image, Decavi, Francisco Oller, Gráficas Varias y Establiments Pere Domingo.