Una chica de 14 años denuncia que fue violada por una ‘manada’ de menores
La víctima conocía a sus agresores, lo que se repite en el 64% de este tipo de casos
¿Qué se esconde detrás de los delitos sexuales cometidos por menores? Es la pregunta a la que busca respuesta un trabajo de la Universidad del País Vasco y la UNED –en España hay muy pocos estudios sobre el tema– a partir de entrevistas realizadas a 73 adolescentes varones de diversas comunidades autónomas sobre los que pesaba, cuando se contactó con ellos, una medida judicial por un delito sexual.
La publicación de los resultados de esta investigación revela, entre otras cosas, que el 7% de los delitos sexuales cometidos en España son protagonizados por menores y ha coincidido con la denuncia de una chica de 14 años, en Teruel, que asegura haber sido víctima de una violación grupal cometida por otros cuatro menores –una nueva manada, pero en este caso muy precoz– a los que conocía.
Este último hecho, que los presuntos agresores formen parte del entorno de la víctima, encaja con los resultados del estudio universitario. Sus autores, Sandra Siria, Enrique Echeburúa y Pedro J. Amor, comprobaron en los casos investigados que “el 64% de esas víctimas menores de edad conocían al autor o autores de las agresiones y, en el 18% de los casos, el violador fue un miembro de su propia familia. En el resto del casos (36%) víctimas y agresores no se conocían. Y otro dato preocupante: “En el 22% de las violaciones entre menores intervienen dos o más agresores”.lo que coincide también con lo ocurrido en este último caso conocido en Teruel. La juez decretó la noche del jueves el internamiento en un centro de menores de tres de los presuntos agresores. El cuarto, el de mayor edad (ayer cumplió 18 años) quedó en libertad. La magistrada ha prohibido a esos chicos comunicarse con la víctima por cualquier medio y aproximarse a ella a una distancia inferior de 100 metros. .
Los hechos ocurrieron en un garaje, que esa pandilla había reconvertido en una especie de peña, y la chica acudió a un hospital, donde se corroboró la agresión sexual.
El estudio constata –lo que también coincide con el caso denunciado por la chica de Teruel– que alrededor de la mitad de las víctimas eran de edad similar a los autores (54%), mientras que el 34% eran niñas y niños más pequeños y el 12% eran mujeres adultas. La mayoría de estas víctimas eran de sexo femenino (72,5%), pero hubo un 25% de víctimas masculinas (todas ellas de edad inferior o similar al adolescente que cometió la agresión).
Los autores del estudio insisten en “que es importante centrar la atención en los factores de riesgo relacionados con estas conductas a tan temprana edad para poder
Los hechos ocurrieron en Teruel y la juez ha enviado a un centro de menores a tres de los cuatro denunciados
abordarlos dentro de programas de prevención e intervención”.
Y una sorpresa confesada por esos profesores. “El área menos estudiada, para encontrar una explicación a esas conductas, es el desarrollo sexual que han tenido estos menores, la sexualidad experimentada a lo largo de su infancia y todo lo que haya podido interferir en su aprendizaje sobre ese universo”. Aquí se incluyen desde “un entorno familiar en el que hayan sido testigos de prácticas sexuales inadecuadas para su edad o el inicio precoz en el consumo de pornografía”.