La Vanguardia

Tenso homenaje en Armenia a los muertos en Nagorno Karabaj

El primer ministro Nikol Pashinián, abucheado y acusado de “traidor”

- EREVÁN

Una procesión de duelo en memoria de los soldados armenios caídos en la reciente guerra en Nagorno Karabaj se desarrolló ayer bajo tensión y acusacione­s de traición contra el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, al que veteranos y opositores quisieron impedir la entrada al cementerio militar de Yerablur.

La procesión, a la que se sumaron varios miles de personas y que estuvo encabezada por Pashinián, partió de la plaza de la República en Ereván y, tras recorrer más de seis kilómetros a pie, llegó a Yerablur. El panteón está ubicado en lo alto de una colina en las afueras de la capital armenia y está especialme­nte dedicado a los soldados que perdieron la vida en los conflictos armados por el enclave de Nagorno Karabaj desde 1988.

La marcha de duelo se enmarca en los tres días de luto que Pashinián declaró en recuerdo de los cerca de 2.800 soldados karabajíes y armenios fallecidos en los 44 días de la guerra que comenzó el 27 de septiembre con un ataque del ejército de Azerbaiyán. Según cifras oficiales, en la guerra falleciero­n más de 5.500 militares en ambos bandos y en torno a 150 civiles. De otro lado, y según el Ministerio de Defensa armenio, 73 soldados permanecen desapareci­dos a raíz de las escaramuza­s producidas en dos localidade­s después de alcanzado un alto el fuego mediado por Rusia el pasado 10 de noviembre. Esta semana, los cuerpos de más de 40 soldados armenios fueron encontrado­s, según informaban el viernes los servicios de emergencia­s de Nagorno Karabaj.

En la explanada de Yerablur, el primer ministro fue recibido con gritos de “Nikol traidor” y “Nikol no debe acercarse” al cementerio. Pashinián se encuentra bajo una enorme presión de la oposición y de aquellos armenios que exigen su dimisión precisamen­te por firmar ese acuerdo de alto el fuego con el presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíev. Fue de este modo que Azerbaiyán recuperó parte de los distritos en torno a Nagorno Karabaj que habían sido ocupados por la fuerzas armenias karabajíes en 1994. El resto de este territorio lo reconquist­aron los azeríes por las armas en esta última guerra. Nagorno Karabaj permanece desde entonces custodiado por fuerzas de paz rusas, unos 2.000 efectivos.

Veteranos, familiares de soldados caídos y opositores trataron de impedir la entrada de Pashinián al panteón. Tuvo que hacerlo por un corredor abierto por las fuerzas de seguridad y solo permaneció media hora en el cementerio.

La oposición ha llamado a una huelga general para el 22 de diciembre, al final de los tres días de luto nacional, a fin de obligar a Pashinián a dimitir. Fue precisamen­te después de una huelga general, en abril del 2018, como Nikol Pashinián acabó siendo aupado al poder. Ayer mismo, catorce generales suscribier­on un comunicado en el que piden la dimisión del Gobierno por la manera en que condujo la guerra. Mientras, el presidente del país, Armén Sargsyán, mantiene conversaci­ones con todas las fuerzas políticas. Sargsyán llegó a pedir en noviembre la renuncia de Pashinián.

La oposición convoca una huelga general y 14 generales firman un manifiesto exigiendo la dimisión del Gobierno

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PHOTOLURE / REUTERS El panteón y cementerio de Yerablur, en Ereván, durante la concentrac­ión de duelo de ayer

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