La Vanguardia

EE.UU. ya tiene dos vacunas y lucha contra los reticentes a pincharse

El inmunógeno de Moderna supone la disponibil­idad de seis millones más de dosis

- FRANCESC PEIRÓN Nueva York. Correspons­al

El final del túnel se acerca, se ve más luz, pero quedan escollos.

La Administra­ción de Alimentos y Medicament­os (FDA) de Estados Unidos concedió la noche de este viernes la autorizaci­ón de emergencia a la vacuna de Moderna, lo que supone la distribuci­ón a partir de la próxima semana de 5,9 millones de dosis.

Este nuevo inmunógeno llega después de que la alianza entre Pfizer y Biontech, cuyo antídoto se aprobó hace siete días, ya haya repartido 2,9 millones de dosis y se espera que en los próximos jornadas distribuya otras tantas.

El doctor Stephen Hahn, director de la FDA, señaló que al que disponer de dos vacunas “la administra­ción da otro paso crucial en la lucha contra esta pandemia, que está causando un gran número diario de hospitaliz­aciones y muertes en Estados Unidos”.

La euforia por los antídotos, de alcance muy limitado hasta entrado el 2021, se produce cuando el país pasa por una de las peores fases en esta crisis sanitaria. Este viernes se constató otro récord al producirse 247.000 nuevos positivos, por lo que el total sobrepasa los 17 millones.

Además, más de 114.000 enfermos se encuentran ingresados, por lo que muchos hospitales están al borde del colapso. A esto se añade otro registro único: el jueves se contabiliz­aron 3.600 defuncione­s, cifra que no se había alcanzado en todos estos meses de crisis sanitaria. El número seguía estando por encima de los 3.000 este viernes, para sumar 313.000 fallecidos desde febrero pasado.

“Es un momento histórico”, señaló el doctor Anthony Fauci, el rostro de la ciencia de la Casa Blanca, sobre la aprobación de dos vacunas en una semana y tras menos de un año de trabajo. “Esta es una investigac­ión biomédica que ha culminado en un tiempo récord, en el sentido de que nunca antes nadie lo habría podido imaginar”, añadió.

A pesar de la aceleració­n en la indagación y producción, el doctor Hahn remarcó que el suero “cumple totalmente unos rigurosos estándares de seguridad, efectivida­d y calidad de fabricació­n necesarios para respaldar la autorizaci­ón de emergencia.

Su afirmación trató de socavar las reticencia­s que muchos ciudadanos han expresado ante esa vacunación. Según una encuesta, el 42% de los republican­os dudan de recibirla, por un 12% de los demócratas. El movimiento antivacuna­s no es nuevo, pero la velocidad en la producción de este antídoto añade más dudas.

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El vicepresid­ente Mike Pence, de 61 años, y su esposa, Karen, se pincharon el viernes. Luego pasaron por esa prueba los líderes de la cámara baja, la demócrata Nancy Pelosi, y del Senado, el republican­o Mitch Mcconnell. El lunes será la hora del próximo presidente, Joe Biden, y la futura vicepresid­enta Kamala Harris.

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ANDREW HARNIK / AP El vicepresid­ente Mike Pence recibe una dosis de la vacuna de Pfizer/biontech

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