La cantaora Rocío Márquez da alas al Festival Accents
La Covid-19 reduce los actos culturales fuera de las ciudades
Si a estas alturas organizar cualquier certamen cultural supone un esfuerzo colosal, que se celebre fuera de una gran ciudad puede considerarse un pequeño milagro. Las medidas para contener la pandemia ha obligado a reprogramar una y otra vez todo tipo de eventos culturales que tenían que celebrarse en pueblos y ciudades pequeñas, donde buena parte del público acude desde los municipios vecinos, hasta ahora confinados los fines de semana. El Festival Accents, que se ha convertido en el pequeño milagro musical de las comarcas de Tarragona, encara esta semana su recta final con el flamenco rompedor de Rocío Márquez que actuará el miércoles en el Teatre Fortuny de Reus.
La cantaora de moda, que hace unos meses se erigió como la primera artista española en conseguir el prestigioso premio francés Les Victoires du Jazz, cantó este fin de semana en Madrid y el de Reus será su último concierto del año. Actuará acompañada por el guitarrista catalán Canito para presentar el disco Visto y el próximo lunes será el turno de Alquimia Flamenco. Para estos dos recitales aún quedan entradas disponibles.
“Hemos tenido que posponer esta actuación y adaptar el programa en numerosas ocasiones”, mantiene Isaac Albesa, director artístico del Festival Accents, dedicado a la música de autor y que este año celebra su séptima edición. La programación ya estaba cerrada en marzo, cuando se dictó el primer confinamiento. Se reprogramó para el otoño y llegaron las nuevas restricciones y las sucesivas adaptaciones. El confinamiento municipal entre viernes y lunes obligó a trasladar los conciertos de lunes a jueves, cuando la movilidad sí estaba permitida, y los horarios se avanzaron por el toque de queda.
En Barcelona y en ciudades grandes hay suficiente masa crítica para soportar un festival, pero no en La Selva del Camp o Cambrils, las localidades donde, además de Reus, se han celebrado los quince conciertos del Festival Accents de este año, entre ellos el de Ferran Palau, Blaumut, los hermanos Cubero, Pau Vallvé o Roger Mas el pasado viernes.
“El Govern anunció un pasaporte cultural que desgraciadamente al final no se materializó”, lamenta Albesa, quien suscribe el manifiesto de Xàfec, la Red de Festivals de Catalunya, que con 37 socios asumió la reducción del aforo para garantizar las distancias de seguridad pero denunció desde el primer momento el confinamiento municipal: “La programación de teatros y auditorios no pueden subsistir sólo con espectadores de un solo municipio”, reiteraron. Además, cada nuevo anuncio con cambios de medidas para contener la pandemia se ha traducido en devolución de entradas.