El Celta de Coudet sigue en racha y roza ya los puestos europeos
El Celta que entrena el argentino Eduardo Chacho Coudet sigue protagonizando una recuperación sorprendente. Hace un mes, cuando Coudet sustituyó en el banquillo celeste a Òscar García Junyent, el primer entrenador destituido en Primera, el Celta era colista. Coudet debutó con derrota en el Pizjuán ante el Sevilla (4-2), pero acaba de enlazar su cuarta victoria liguera consecutiva (quinta si se cuenta el 0-5 al Llanera en la Copa).
El Celta derrotó en la tarde de ayer al Alavés (2-0), los dos goles de Brais Méndez, y ha escalado desde el último hasta el séptimo lugar de la tabla. Las cuatro victorias consecutivas es algo que los celestes no conseguían desde la etapa de Luis Enrique a frente de la nave viguesa.
Las victorias no son producto de la suerte, van unidas al buen juego y una gran eficacia defensiva. Los números así lo demuestran. El Celta ha marcado once goles y solo ha encajado uno. Coudet ha caído de pie.
Ante el Alavés, que salió desafiante con una presión alta, el Celta supo controlar bien el juego pasados los primeros minutos, en los que los visitantes tuvieron un par de ocasiones claras.
El Celta reaccionó después de esos dos avisos y, casi mediada la primera mitad, a los 18 minutos, marcó un gol en su primera aproximación con peligro: un centro de Olaza y un cabezazo de Brais.
Sin grandes ocasiones en la segunda parte, el Celta solo pudo sentenciar el encuentro cerca del final, a los 79 minutos, en una jugada colectiva que pasó por Tapia, Olaza, Aspas y otra vez Brais, que redondearía la tarde con su doblete, el primero de la temporada.
En el Nuevo Los Cármenes el Granada se impuso sin demasiados problemas a un Betis de capa caída. Soldado abrió el marcador gracias a un dudoso penalti a los doce minutos y el propio Soldado cerraría la cuenta a los 20. Mientras, en Cádiz el Getafe levantó el vuelo y se impuso por 0-2 con goles de Juan Hernández y Maksimovic.