La Vanguardia

Famosos a los que ha sonreído (o casi) el sorteo de la lotería de Navidad

La desigual fortuna de las celebridad­es con la lotería: del gordo a perder décimos premiados

- BEGOÑA CORZO SUÁREZ Barcelona

La cantinela de los niños de San Ildefonso protagoniz­a las mañanas de todos los 22 de diciembre. Voces inocentes que desgranan números con los que tapar agujeros. La suerte, como la justicia, dicen que es ciega. Así que no distingue ni de nombres ni de estatus. Rostros desconocid­os serán más felices hoy, como lo fueron celebridad­es a las que le tocó la lotería. A unos les cayó el gordo, a otros se les caducó el premio, algunos perdieron los décimos de la suerte y los más pillos directamen­te compraron los billetes ganadores, para qué tentar a la suerte. Incluso estrellas como George Clooney jugaron con fines benéficos. El actor compró 1.000 boletos de lotería italiana, para donar lo ganado a los damnificad­os por el terremoto de Haití del 2010. Por desgracia, no logró su cometido, como tampoco Elizabeth Hurley, que adquirió 500 décimos con el mismo fin.

Mucho más afortunado fue el intérprete Nacho Guerreros, el conserje Coque de La que se avecina. Le cambió la vida que su padre ganara el gordo de Navidad en el sorteo del 2002 y lo compartier­a con él. Pudo dejar su trabajo de camarero y convertirs­e en actor. Ese año el primer premio cayó en Calahorra (La Rioja) y era el primer sorteo que se cantaba en euros. Con el premio, Guerreros abrió una tienda de decoración en Madrid y compró los derechos de la obra de teatro Bent, de Martin Sherman. Por esta interpreta­ción, fue nominado por la Unión de Actores mejor actor de teatro en el 2005 y se le abrieron las puertas de la televisión.

La probabilid­ad de que toque el gordo de Navidad es remota. Concretame­nte, de una entre 100.000 o del 0,00001%. La estadístic­a para un reintegro es de un 10% y de que caiga algún pellizco ,de un 5 %. y un pellizco de los buenos le tocó a Mercedes Milá en el 2006, cuando presentaba Gran Hermano. Ella y sus compañeros de la productora Megamedia pasaron segurament­e una de sus navidades más felices. Otra periodista, Nieves Herrero, también tuvo la suerte de su parte un 22 de diciembre. Su familia fue agraciada con un cuarto premio. Parte del dinero lo invirtiero­n en la lotería del Niño, y el hermano de Nieves ganó otro premio menor . Otro rostro televisivo agraciado por la suerte es Isabel Gemio. Ella tampoco es muy fan de esta tradición navideña, pero dice que a sus hijos, Gustavo y Diego, les hace gracia el sorteo. Así que juega y ha reconocido que ha ganado “algún pellizquit­o”.

A Fructuoso Sánchez, Fortu, líder de la banda Obús, jurado de OT

y exconcursa­nte de Supervivie­ntes,

la fortuna le sonrió en el 2015 con dos décimos del quinto premio de Navidad; en total, logró 12.000 euros. El músico demostró que era tan afortunado en el juego como en el amor y le compró un Toyota Aygo rojo valorado entonces en unos 9.500 euros a su pareja, Yoli, con la que concursó en su día en GH Dúo.

El colmo de que te toque la lotería debe de ser que ni te enteres. Eso le pasó a Carmen Lomana. La socialité

siempre ha dicho que ella no suele comprar décimos. Y aun así le tocó un número que le regalaron, claro que a la despistada millonaria ni se le ocurrió comprobar las listas. Cuando lo hizo, ya estaba caducado y no pudo canjearlo. No parece que esta mala suerte le afectara mucho.

Más desconsola­da se mostró Belén Estaban con su “casi gordo” del

23 de diciembre del año pasado. El número ganador fue el 26.590 y ella llevaba el 29.590. Una anécdota en un año feliz en amores, ya que se casó el 22 de junio del 2019 con Miguel Marcos en una boda por todo lo alto. De ahí a la portada de¡hola!, que ese sí que es un premio gordo.

Un ataque de pánico tuvo Soraya Arnelas el mismo año que la suerte le fue esquiva a Belén Esteban. La cantante acostumbra a comprar números en casi todas las ciudades a las que viaja –cuando se podía viajar y ella podía dar conciertos, claro– y los comparte con la familia. La extriunfit­a tenía dos boletos del segundo premio del Niño. Pero aseguró que los había perdido y tuvo en vilo a todos sus seguidores en Instagram durante el día de Reyes de este año. Horas después, mostraba eufórica el número 40.160 rodeado con un corazón rosa. La extremeña ya ganó en otra ocasión un segundo premio en Navidad.

En el año 2004, los ahora reyes de España fueron agraciados con 26.592 euros, un gran regalo de bodas que les hizo Miguel Garau, excompañer­o de Letizia en RTVE. Como hacen muchos españoles, a la hora de elegir un número, buscó un décimo que correspond­ía a una fecha muy especial para ambos, nada menos que el día de su boda, celebrada el 22 de mayo del 2004. Garau movió cielo y tierra para encontrarl­o y tuvo que convencer a la Falla de Castellar, en Valencia, clientes fijos de ese número, para que le dejaran comprarlo. “Yo quería que Letizia y el príncipe Felipe tuvieran boletos premiados y la única solución era comprar el 22.500, el 22.501...”, relató Garau entonces. Así que compró diez números consecutiv­os para cada uno. Les cayó la pedrea del 22.500 y el gordo fue el 54.600, con lo que también tenían reintegros y aproximaci­ones. Al propio Garau también le tocó. Los ahora reyes donaron lo ganado a una oenegé.

Y donde no hay suerte, que haya humor, como escribió, Ana Morgade el año pasado en Twitter: “Es posible que si llevas toda la vida jugando a la lotería te salga mejor haber juntado lo que has gastado hasta ahora que te toque un quinto premio a estas alturas. Bofetón matemático. Felices fiestas, caris”.

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