Sin avances en la negociación del SMI con un Gobierno dividido
La reunión del Gobierno con los agentes sociales para tratar una eventual subida del salario mínimo interprofesional (SMI) no alumbró ayer avance alguno, mientras siguen los desencuentros en el seno del Ejecutivo. Los sindicatos, que reclaman una subida del SMI (ahora situado en 950 euros) del 1,8%, se quejaron de que el equipo de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no había presentado una propuesta concreta. Por su parte, la patronal, que se opone a cualquier mejora, se negó a negociar un nuevo SMI, según fuentes de la negociación.
Trabajo volverá a convocar a los agentes sociales la próxima semana.
Por la mañana, la vicepresidenta Nadia Calviño no dudó en alinearse con el ala socialista del Gobierno y reclamar esperar al 2021, con la recuperación “enfilada”, para tomar una decisión sobre el SMI. Calviño defendió esta actitud de prudencia, sobre todo si no hay un acuerdo con patronal y sindicatos. “El Gobierno no ha tomado la decisión. Si no hay acuerdo entre los agentes sociales, a lo mejor es que hay que tomarse un poco de tiempo, hasta el momento en que tengamos enfilada la recuperación económica y haya una mayor certidumbre”, explicó Calviño en La Sexta. La vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos destacó que no es lo mismo elevar el SMI en un contexto de crecimiento económico que hacerlo cuando existe una previsión de caída del PIB de dos dígitos.
Solo unos minutos antes, la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, defendió que “sería muy preocupante” que las empresas españolas no pudieran soportar una subida del salario mínimo de apenas 9 euros mensuales, insistiendo en una subida del 0,9%. “Trabajo está muy preocupado por las empresas, pero también por ese 1,5 millones de trabajadores que se verían afectados para mal por la no subida del SMI”, añadió.