El plan del Gobierno para la hostelería decepciona a los afectados
Los 4.220 millones anunciados no incluyen ayudas directas a empresas
El Gobierno dio a conocer ayer su esperado plan de ayudas para el sector de la restauración. El decreto incluye medidas sobre alquileres y moratorias fiscales, pero no ayudas directas, lo que fue mal recibido por el sector.
“Ambicioso, por su importe. Oportuno, por el momento en el que llega con nuevas restricciones. Y eficaz, porque los interesados se beneficiarán de estas ayudas a partir de mañana”. Con estas palabras presentó ayer la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto (desde su casa por encontrarse confinada), el plan de rescate al sector de la hostelería, el comercio y el turismo que, tras más de dos meses de espera por parte del sector, aprobó ayer el Consejo de Ministros.
Se trata de un conjunto de medidas con ayudas valoradas en 4.220 millones de euros, enfocadas a “minorar los costes fijos de las empresas de los sectores afectados para ayudarles a mantener la actividad en un momento de caída de la demanda”, según explicó Reyes Maroto.
Pero entre esas medidas no se incluye ni un euro para las ayudas directas que reclaman los empresarios y que solo en la hostelería consideran que son necesarios 8.500 millones de euros para evitar el cierre de 100.000 establecimientos y la pérdida de más de un millón de empleos. “La falta de ayudas directas en el plan del Gobierno es incomprensible teniendo en cuenta lo aprobado en otros países de Europa, donde el peso del sector turístico es mucho menor en el PIB o en generación de empleo en comparación con España”, lamentaba ayer José Luis Yzuel, presidente de la patronal Hostelería de España. Para Yzuel el plan es “insuficiente”. Los empresarios del ocio nocturno van más allá, lo calificaron de “mentira” y “tomadura de pelo”. Tampoco ha convencido a las agencias de viajes. “Echamos de menos medidas más específicas”, dijo Carlos Garrido, presidente de CEAV, tras alertar del peligro de cierre “de cerca de 3.000 agencias y la pérdida de 28.000 puestos de trabajo”. La medida que más aplausos suscita es que la restauración, el transporte y las agencias de viajes han sido identificadas como sectores hiperprotegidos en los ERTE, con lo que quedan exonerados de las cuotas de la Seguridad Social de los trabajadores tanto activos como inactivos, de momento, hasta el 31 de enero.
Mientras, el Gobierno ha querido poner el foco en un potente paquete de ayudas para rebajar los costes fijos. “Son las ayudas directas que podemos aplicar desde el Gobierno central”, aseguró la ministra portavoz María José Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Esas ayudas pivotan en torno a cuatro ejes de actuación. Por un lado, están las destinadas a rebajar el alquiler, con un presupuesto de 324 millones de euros. Junto a ellas se han aprobado medidas de liquidez valoradas en 520 millones de euros e incentivos laborales y rebajas en la Seguridad Social por valor de 567 millones. Se prevé igualmente un cuantioso paquete de ayudas fiscales de 2.809 millones de euros.
Entre las medidas estrella está la reducción del coste de alquiler.
“Queremos que sea una medida acordada entre el inquilino y el propietario del local”, reclamó Reyes Maroto. Pero para cuando no haya acuerdo, el Gobierno ha decretado que los grandes propietarios (con más de 10 inmuebles) rebajen un 50% el precio del alquiler desde este miércoles hasta cuatro meses después de que finalice el estado de alarma. También se les plantea co
REBAJA DE ALQUILERES
Los grandes propietarios estarán obligados a rebajar el 50% o demorar pagos
INCENTIVOS FISCALES
Se reduce hasta un 35% la contribución fiscal en el régimen de módulos
mo alternativa que permitan una moratoria en el pago de la renta sin penalización ni intereses y cuya devolución se podrá extender hasta durante dos años que empezarían a contar pasados los cuatro meses de finalización del estado de alarma.
Para los pequeños propietarios, se ha aprobado un incentivo fiscal que les permite incluir como gasto deducible del IRPF la cuantía integra de la reducción del alquiler que apliquen a sus inquilinos. “Incluso si deducen el 100%”, ha puntualizado Maroto. El Estado ha cuantificado esta ayuda en 324 millones de euros y calcula que se beneficiarán de ella más de 413.000 negocios.
Una segunda línea de actuación es la que actúa en el refuerzo de las medidas de liquidez. En este paquete, que cuenta con una dotación de 520 millones de euros, destaca la creación de un nuevo tramo de avales ICO exclusivo para los sectores de turismo, transporte y restauración que está dotado con 500 millones de euros y que amplía las garantías públicas hasta el 90%, un 10% más que las que ofrecen los avales ICO aprobados hasta el momento.
También, como pedían los empresarios, habrá ampliación de plazos de amortización de esos créditos y se creará una Sociedad de Garantía Recíproca dotada con 19,9 millones de euros para financiar exclusivamente proyectos turísticos. El paquete de medidas tributarias permitirá a las empresas con facturación inferior a seis millones retrasar el pago de sus compromisos fiscales del próximo mes de abril hasta octubre. A esto se une una rebaja de la cuantía de los módulos de hasta el 35% para los sectores más afectados.
En cuanto a las ayudas directas, tanto la ministra Reyes Maroto como la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, explicaron ayer que se deberán canalizar a través de las comunidades autónomas.