El cuadrado de Messi
El plan de juego blaugrana aplicó un matiz interesante en el medio del campo: dejar espacio para las apariciones de Messi. Cuando el Barça tuvo la posesión del balón, los tres centrocampistas se situaron con un doble pivote (Pjanic-de Jong) más Pedri por delante pero ladeado a la izquierda dejando un espacio libre en el sector derecho para las apariciones del diez. Eso es lo que explica que la fotografía de muchos de los ataques del Barça diseñara un cuadrado y no un triángulo. Y el encuadre le sirvió a Messi para recibir mucho y en zonas cualitativamente buenas, ya que de las 59 intervenciones de la primera parte, 54 fueron en tres cuartos de campo. En la segunda convirtió gol. Su gol 644. Sí…644, ¡brutal!