Montero quiere decidir el SMI a mediados del 2021
La ministra portavoz pide prudencia por la incertidumbre
La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, añadió ayer más confusión sobre el salario mínimo interprofesional (SMI) del 2021 al defender que debían aplazar la decisión hasta mediados del próximo año. En su opinión, el Ejecutivo “no puede ignorar” la situación económica actual, y destacó que el primer semestre del 2021 estará condicionado por la evolución del virus y de las vacunas. Pocas horas después, desde Mallorca, la ministra de Trabajo y férrea adalid de un incremento de los salarios más bajos, Yolanda Díaz, no contradijo el calendario aireado por sus socios de coalición, con los que ha mantenido un enfrentamiento abierto para evitar la congelación del SMI. Díaz se limitó a recordar que era una medida que aún estaban negociando con los agentes sociales.
Al término del Consejo de Ministros, Montero reconoció que debían esperar al diálogo social, pero pidió “prudencia” y defendió “reevaluar la situación” a partir de mediados de año, momento en el que “estaremos en mejores condiciones” de juzgar cómo va la economía. La portavoz se sumó así a la posición defendida el lunes por la vicepresidenta tercera, Nadia Calviño, quien había abogado por evitar tomar una decisión de forma inmediata y esperar a que la recuperación esté “enfilada” en el 2021.
El lunes se reunieron el equipo de Trabajo y los agentes sociales, sin que se produjeran avances reseñables. La distancia en el diálogo social es enorme: la patronal no quiere oír hablar de tocar los 950 euros actuales, aupada por la división exhibida en el seno del Gobierno. CC.OO. y UGT piden que al menos se suba un 1,8%, mientras que Yolanda Díaz sigue aferrada a un incremento del 0,9%, como el decidido para funcionarios y pensionistas en línea con la inflación prevista. En principio, antes de que Montero se inclinara por retrasar el debate hasta junio del 2021, las partes habían quedado en verse con toda probabilidad la próxima semana.
La ministra de Trabajo saludó ayer las palabras de Montero como una señal de que “ya nadie habla de congelar” el SMI. Aunque si finalmente se deja la decisión para el segundo semestre del 2021, el salario mínimo se queda en los 950 euros y a expensas de un posible incremento, en función de la evolución de la economía. Díaz aprovechó además para convocar a la patronal y a los sindicatos para negociar la nueva prórroga de los ERTE después de Reyes.
Yolanda Díaz contesta que los agentes sociales aún están negociando la medida